MADRID. Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) han especificado a Efe que este era el juzgado que estaba de guardia el pasado viernes cuando un policía se personó para solicitar una orden de protección personal porque se sentía amenazado por varios compañeros de trabajo en un chat, sin que interpusiera denuncia o querella por delito de odio.
El juez, en presencia del Ministerio Público, pidió a las fuerzas y cuerpos de seguridad que identificasen a las personas que supuestamente habían vertido las amenazas y poder así confirmar la veracidad de lo denunciado.
Una vez tomados estos testimonios se decidirá si se otorga protección al denunciante, ha precisado el TSJM.
Fuentes de la Fiscalía de Madrid han precisado hoy que el policía acudió a la Fiscalía de Delitos de Odio pero no denunció el contenido del chat, sino amenazas de otros agentes, por lo que se le conminó a denunciar en un juzgado.
Ayer fuentes municipales confirmaron que los insultos y amenazas vertidos en ese chat contra la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y otras personas fueron desveladas por un agente municipal que consideró que podrían constituir un delito de odio y lo denunció ante la Unidad de la Diversidad de la Policía Municipal, que lo comunicó a la Dirección del Cuerpo.
En el chat se llama a Carmena "vejestorio despreciable", entre otros insultos, y se dice: "Lo que es terrible es que ella no estuviera en el despacho de Atocha cuando mataron a sus compañeros".
Hoy eldiario.es ha desvelado más mensajes del mismo chat en la que algunos de los participantes alaban a Hitler, insultan a inmigrantes, llaman "hijo de perra" a Pablo Iglesias e incluso amenazan al agente que ha denunciado los hechos.
Esta mañana el Ayuntamiento ha informado de que el juez que investiga este asunto ha pedido a la Policía Municipal datos sobre la identidad de los participantes en ese foro.
El denunciante tiene desde ayer escolta policial de compañeros del Cuerpo, según han indicado a Efe fuentes de CCOO, sindicato en el que milita.
También hoy el Ayuntamiento de Madrid ha explicado que estudia la posible inhabilitación de los agentes que insultaron y vertieron amenazas en el chat policial, a quienes se ha abierto una "información reservada", el paso previo a un expediente.
Por su parte el sindicato CSIF ha manifestado hoy "su más absoluto rechazo al contenido de los mensajes, los insultos y las expresiones publicadas, especialmente aquellos dirigidos contra representantes políticos y medios de comunicación" y sostiene que la justicia determinará las responsabilidades.
Al igual que el resto de centrales sindicales, CSIF ha subrayado la profesionalidad de los integrantes de la Policía Municipal de Madrid.