gasteiz - Todavía no hace un mes desde que Pedro Sánchez ratificara en el congreso del PSOE su liderazgo en el partido, y ya empiezan los movimientos efectivos para lograr su objetivo; echar a Mariano Rajoy de La Moncloa. Dichos movimientos pasan por un acercamiento a Podemos que ya apuntó en su pugna por la Secretaría General y que ahora se materializan con dos hitos clave, el más que probable acuerdo de coalición de gobierno entre ambos partidos en Castilla-La Mancha y la reunión que la semana que viene mantendrá con el líder de Podemos, Pablo Iglesias.
El encuentro del lunes por la tarde en el Congreso de los Diputados, en el que Sánchez carece de escaño, servirá para abordar cuestiones generales, pero con la intención de cerrar los equipos que bajarán al terreno para preparar estrategias sectoriales conjuntas y concretas en el Legislativo español. Ya antes se han producido reuniones de contenido entre ambas formaciones, aunque no al más alto nivel, para recomponer unas relaciones que han sido tensas desde el mismo nacimiento de Podemos y hasta el periodo de la Gestora en el PSOE, pasando por el intento de Sánchez de cerrar una alianza con Podemos y Ciudadanos en la anterior y fracasada legislatura. Finalmente, las portavoces de sus respectivos grupos parlamentarios, Margarita Robles e Irene Montero, cerraron una cita que Podemos esperaba desde hace semanas.
Sánchez, “abierto al diálogo y a escuchar”, según informa Efe, se encontrará con un Iglesias que quiere debatir en torno a cuestiones como el empleo juvenil, las pensiones, la corrupción, políticas de igualdad y la situación en Catalunya.
Iglesias desea empezar a trabajar con el PSOE “sin prisa pero sin pausa” para abrir una “relación diferente” con los socialistas que derive en una eventual alternativa de gobierno. “Estamos satisfechos de poder tener una relación diferente con un PSOE que creo que se está sensatamente acercando a nosotros y sensatamente alejándose del PP y de Ciudadanos”, afirmó el líder de Podemos.
oferta en castilla-la mancha En cuanto a la oferta a Podemos para entrar en el Gobierno de Castilla-La Mancha por parte del socialista Emiliano García-Page, muy crítico hasta ahora con la formación morada, no está exento de riesgos para los de Iglesias, que lo avala al igual que Pedro Sánchez. Por lo pronto, los Anticapitalistas avisan de que Podemos se puede convertir en “muleta y cómplice” del PSOE, según el portavoz de esta corriente, Miguel Urbán. Iglesias, en todo caso, sentenciaba que “rectificar es de sabios”.