pamplona - El coronel jefe de la Guardia Civil en Navarra, Javier Hernández, se mostró ayer en desacuerdo con “la manera en que se ha presentado a la población de Alsasua, como una población especialmente complicada” tras la agresión a dos guardias civiles y el procesamiento de nueve personas por estos hechos, y afirmó que “no es así”.
Javier Hernández aseguró que “hay localidades donde la vida para los guardias puede ser más o menos cómoda” y, en este sentido, dijo que la Guardia Civil “no se siente especialmente incómoda en Alsasua”.
Por su parte, la delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba, manifestó que “no se puede intentar coaccionar al poder judicial con una serie de actuaciones” en el caso del juicio por la agresión a dos guardias civiles y sus parejas en Alsasua. “El poder judicial es libre, los juzgarán y decidirá qué ha pasado y calificarán los delitos de una forma o de otra”, ha añadido.
Sobre la manifestación convocada mañana en Alsasua bajo el lema Altsasu, Alba afirmó que “no ve” que haya una movilización “a favor del pueblo de Alsasua” porque “a favor del pueblo de Alsasua estamos todo el mundo”. “También estamos otros en contra” de que “unos guardias civiles por ser guardias civiles, con sus mujeres, recibieran una paliza”, apuntó.
Para la delegada del Gobierno en Navarra se pretende “desvirtuar unos hechos” y señaló que “ya sabrá quien vaya a esa manifestación lo que está haciendo”. Así, en referencia a la presencia de una representación del Gobierno de Navarra en la manifestación de Alsasua, aseguró que “el poder ejecutivo tiene que ser completamente independiente del poder judicial”.
Para Alba, a los únicos a los que hay que apoyar es a “los que recibieron la paliza” y no “a quien realizó la agresión”. Aseguró, además, que “hay una gran parte de la población de Alsasua que es gente normal, otra cosa es que unas minorías impidan, a lo mejor, a esas personas normales que demuestren el aprecio que puedan tener o no a la Guardia Civil”.
Por otro lado, alcaldes y representantes de los quince Ayuntamientos de Sakana solicitaron ayer en Altsasu la puesta en libertad de los siete jóvenes encarcelados por orden de la Audiencia Nacional al tiempo que hicieron un llamamiento a participar en la manifestación silenciosa de mañana, qe partirá a las 13.00 horas desde el supermercado Netto. Los ediles abogaron por “el regreso a la cordura y la proporcionalidad en el tratamiento mediático y judicial” tras el altercado ocurrido el pasado 15 en octubre en las ferias de Altsasu. En su opinión, “es necesario que la causa no sea llevada por la Audiencia Nacional y se respete el derecho de defensa, el principio de juez natural, la libertad de expresión y al derecho de asociación”. - N.M./E.P.