Bilbao - El Partido Popular ha redoblado su presión para conseguir que su diputado y candidato en las elecciones del domingo Pedro Gómez de la Serna abandone su candidatura. El PP pretende llegar al domingo sin la losa de un nuevo caso de corrupción que ha aflorado en plena campaña electoral. Beatriz Escudero, número uno de la lista por Segovia en la que se presenta Gómez de la Serna, llegó a decir ayer que la dimisión debía ser efectiva antes del debate televisivo cara a cara entre Mariano Rajoy y el candidato socialista Pedro Sánchez que tuvo lugar anoche. “Está haciendo mucho daño al PP, ya no suma, está restando”, clamó la cabeza de cartel por Segovia.
El motivo de la urgencia de la renuncia es doble. Por un lado, la permanencia del diputado en la lista da munición al resto de partidos para atacar a Rajoy por los numerosos y graves casos de corrupción que han tocado de lleno al PP durante esta legislatura. Y, por otro, el PP ya ha acusado la incidencia de este nuevo caso en la campaña electoral, en concreto en Segovia, que está tocada de muerte.
Aunque el pasado viernes los populares apartaron a Gómez de la Serna de la campaña al poco de trascender las informaciones que le vinculan con el cobro de comisiones millonarias por lograr contratos a empresas en África y Latinoamérica, el diputado sigue en la lista del PP porque una vez que la junta electoral aprueba las candidaturas la renuncia es únicamente una cuestión personal.
no coge el teléfono De forma paralela, el comité de garantías del PP abrió un expediente informativo contra De la Serna y contra el hasta el pasado domingo embajador de España en la India, Gustavo de Arístegui, también conseguidor de la presunta trama. Al ser cargo público y depender del Gobierno, Arístegui se vio obligado a dimitir este domingo, dando así un respiro a Rajoy, pero De la Serna es otro cantar. De hecho, la dirección del PP confesaba ayer que el diputado no coge el teléfono desde la semana pasada y que se ha encastillado en defender su inocencia -al igual que lo hace Arístegui- y en denunciar que es víctima de una “estrategia maliciosa e interesada de desprestigio y dirigida” contra él a fin de perjudicarlo en las elecciones del domingo.
La negativa de De la Serna a renunciar provocó que el PP saliera ayer en bloque a exigirle la dimisión, aunque el tono fluctuó entre la contundencia de Cristina Cifuentes -“ya está tardando en renunciar”, dijo la presidenta de la Comunidad de Madrid- a la reacción más tibia de secretaria general del partido, Dolores de Cospedal.
Tras asegurar que el PP “ha hecho lo que tenía que hacer”, que es abrir el expediente informativo, la número dos de los populares precisó que los negocios privados de Gómez de la Serna están declarados “compatibles” por el Congreso de los Diputados a la vez que argumentó que “las personas tienen derecho a defenderse”. “Si yo creyera o si los indicios fueran de comisiones de delito, no estaríamos hablando así, pero no parece que estemos hablando de estas cosas ni mucho menos”, sostenía ayer Cospedal.
Pero las opiniones que más abundan dentro del PP es que Gómez de la Serna debe renunciar ya. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, considera que el diputado “ya está tardando en renunciar” a su puesto de candidato al Congreso porque “está perjudicando gravemente al PP y, además, debe despejar dudas”. Aunque precisó que respeta y no prejuzga la presunción de inocencia, advirtió de que, aún siendo legal su proceder, considera que De la Serna “ha cruzado claramente la frontera entre lo legal y lo ético”.
Exclusividad en el Congreso En esta misma línea, el presidente del Congreso, Jesús Posada, reconoció que el diputado por Segovia está dañando al PP y le recomendó que abandone su candidatura para las elecciones. Aunque se mostró convencido de que Gómez de la Serna “se siente inocente”, señaló que al mantener la candidatura sin poder hacer propaganda electoral perjudica al partido y, además, no puede defenderse en la campaña.
Además, el presidente del Congreso se mostró partidario de reformar el reglamento de la cámara en la próxima legislatura para que haya un mayor control sobre las compatibilidades autorizadas y recalcó que los diputados deben dedicarse al Congreso como “trabajo exclusivo”, y que la “inmensa mayoría” trabaja en la cámara y “no en otras cosas”.
Sin mojarse demasiado pero dejando claro que lo importante es la imagen del PP a solo seis días de la cita con las urnas, desde el Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, manifestó que el diputado “tiene que saber cuál ha sido su actuación y actuar en consecuencia”. “Hay que pensar en lo importante de las elecciones en España”, zanjó.
Por parte del PP de Génova, el vicesecretario de Organización, Fernando Martínez Maillo, manifestó su apoyo “claro y absoluto” a la dirección del partido en Segovia, que el domingo pidió al diputado que renuncie a las listas. El presidente del PP en esta provincia, Francisco Vázquez, reclamó a De la Serna que “dé paso a la siguiente persona de la lista porque está haciendo daño y perjudicando al partido, independientemente de la resolución final” del expediente disciplinario abierto por la dirección.
