Barcelona - Artur Mas tendrá un papel destacado en la campaña de Democràcia i Llibertat, que arrancará y finalizará en Barcelona para reivindicar que es posible avanzar en el proceso soberanista tras el 9-N y el 27-S. Con Francesc Homs como cabeza de lista, el eslogan será la palabra Imposible con las dos primeras letras, im, tachadas, para simbolizar así que “se puede hacer posible lo imposible”, como se ha demostrado en las etapas ya completadas del proceso soberanista. La coalición que configuran Convergència, Reagrupament y la escisión de Unió, Demòcrates de Catalunya, quiere dar presencia al president en funciones porque “es un activo del país y del proceso, y precisamente, en una campaña en la que pedimos a la gente la reivindicación del trabajo hecho, es clarísimo que es un activo y como tal tendrá un papel importante en carteles y mítines”. Además de un debate entre Homs y el líder democristiano Josep Antoni Duran i Lleida, CDC no descarta otras presencias televisivas ya que quiere estar en otros debates con líderes estatales, y además ha pedido un cara a cara con el candidato del PP, Mariano Rajoy.
El director de campaña y diputado de Junts pel Sí, Jordi Cuminal, señaló que ve “claras oportunidades de poder ganar” en el “escenario de empate a cuatro” en Catalunya con Ciutadans, ERC y el PSC, según lo que reflejan la mayoría de encuestas. Sin embargo, la última de ellas, que adelantó ayer El Periódico de Catalunya, y realizada por Gesop, otorga la victoria en votos a En Comú Podem (9-10 escaños), si bien la coalición que integran los partidos de Pablo Iglesias y Ada Colau, además de ICV, EUiA y Equo, se disputaría el triunfo en escaños con ERC (9-11) y Ciutadans (8-10). En cambio, Convergència, encarnada por Democràcia i Llibertat, sufriría una sangría al pasar a quinta fuerza en porcentaje de sufragios, con 7-8 asientos en el Congreso. El PSC obtendría 8-9, el PP sacaría solamente 3 o 4, y Unió se quedaría sin representación. Democràcia i Llibertat no ha programado por ahora ningún acto conjunto con ERC pese a que comparten un punto del programa para defender juntos la independencia en las Cortes. Su campaña contará con un presupuesto de 2.100.000 euros, de los cuales 950.000 euros se dedicaran al envío de papeletas a casa. - I.S.M.