bilbao. El día de la presentación de Vox, uno de sus principales promotores, Santiago Abascal, aseguró que su intención no era dañar al PP. Sin embargo, el exparlamentario popular tiene claro que la CAV puede ser un buen caladero de votos para Vox y que estos pueden llegar a su formación procedentes de su expartido.
En unas declaraciones realizadas a Europa Press, Abascal reconocía ayer que para Vox es prioritario lograr su implantación en Catalunya y la CAV. Con respecto a Euskadi, aseguró que tras conocerse la creación de Vox ha recibido muchas llamadas de personas interesadas en sumarse a este proyecto. Unas declaraciones que confirman lo publicado por este diario el pasado viernes en el sentido de que dirigentes del PP en la CAV, especialmente alaveses, se habían puesto en contacto con Abascal con la intención de pasar a engrosar las filas de la nueva formación.
Abascal reconocía abiertamente que la intención de Vox es captar el voto descontento con el PP en la CAV. "El PP vasco llegó a tener 330.000 votos y diez años después tiene 140.000. Hay mucha gente descontenta con el modo en que el PP les ha representado en los últimos años, y nosotros hemos venido a dar voz y voto a esas personas", manifestó.
Abascal incidió en que uno de los objetivos de Vox es defender una política de rechazo ante ETA y, en este sentido, alabó el trabajo realizado por José María Aznar: "Esa es nuestra referencia, el Estado de Derecho, el imperio de la ley contra el terrorismo y sin ceder permanentemente ante los nacionalistas".