Donostia. Ibermática confía en ser la empresa que se adjudique el concurso para la evolución y mantenimiento de aplicaciones informáticas para la Administración de Justicia de Euskadi que con un importe de 10 millones de euros se fallará el próximo mes de septiembre, tras el archivo del fiscal del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, Juan Calparsoro, de la denuncia sobre supuestas irregularidades en la contratación de proyectos informáticos para el departamento de Justicia en los años 2000 y 2009, y teniendo en cuenta que la empresa guipuzcoana ha seguido trabajando para el departamento de Idoia Mendia desde el anuncio de las acusaciones, hace seis meses, hasta hoy mismo.
Fuentes del sector de las tecnologías de la información (TIC) consultadas por DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, han señalado que, después de lo que ha ocurrido, dejar a Ibermática fuera del concurso sería una decisión inexplicable y causaría un perjuicio aún mayor del que ha sufrido esta empresa desde que se iniciaron las actuaciones.
"La adjudicación de este contrato a Ibermática no debería sorprender a nadie ya que la empresa lleva más de diez años prestando este servicio que, por su complejidad, requiere un conocimiento muy especializado", según manifiestan representantes del sector.
Daño económico De momento, Ibermática no ha podido cuantificar el daño económico causado, tanto en imagen como en su negocio, al no poder medir cuántos contratos se han dejado de firmar como consecuencia de la denuncia del departamento de Justicia, teniendo en cuenta que en la actividad que desarrolla la compañía guipuzcoana es fundamental la confianza entre el cliente y el proveedor.
Lo que sí tienen constatado los responsables de Ibermática es que 15 días después de la rueda de prensa en la que la consejera de Justicia, Idoia Mendia, lanzara las acusaciones, la compañía vio perder dos contratos que estaban en fase final de adjudicación por un importe muy elevado y cuyos clientes procedían tanto del sector público como del privado.
En el entorno de Ibermática son bien conocidas las consecuencias negativas que ha tenido para la actividad de la empresa la denuncia del Gobierno Vasco, ahora archivada, hasta el punto de haber podido incluso traspasar nuestras fronteras e influir de manera negativa en la posible implantación de los procesos informáticos que se han instalado en la Administración de Justicia en Euskadi, en Brasil, en concreto, en el Estado de Río de Janeiro, ya que la tecnología aplicada es puntera en todo el mundo.
En este sentido, el pasado mes de abril, en pleno proceso de actuaciones judiciales, una delegación brasileña encabezada por el procurador general de Justicia del Ministerio Público del Estado de Río de Janeiro, Claudio Soares, visitó Euskadi en un viaje promovido por el cluster Gaia para buscar oportunidades de colaboración que permitieran trasladar a Brasil avances informáticos como la modernización de la Justicia o la nueva oficina judicial, en los que Ibermática y el Gobierno Vasco han sido pioneros.
Hasta tal punto los procesos implantados por Ibermática son un referente en la Administración de Justicia en el Estado que la viceconsejera de Justicia, María Victoria Cinto, -la misma que ha impulsado el informe sobre las irregularidades y la denuncia ante el fiscal-, ensalzó el sistema informático de la Administración de Justicia de la CAV en una revista del Ministerio de Justicia, al igual que hizo hace escasas semanas en una visita a Euskadi de responsables de Justicia de todas las comunidades autónomas.
En la entrevista publicada el pasado mes de noviembre, -cuatro meses antes de iniciarse las actuaciones judiciales-, la que fuera presidenta de la Audiencia Provincial de Donostia, durante varios años, afirmaba: "Hay que considerar que el grado de desarrollo informático en la CAV es muy elevado y permite situar las expectativas inherentes a esos objetivos dentro del período de los cuatro años que establece la ley reguladora del Uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación en la Administración de Justicia".
Sin acciones A pesar del daño causado por la pérdida de actividad de negocio y el daño a la imagen corporativa, durante los seis meses que ha durado la investigación llevada a cabo por el fiscal Calparsoro y que han concluido con el archivo de la denuncia presentada por Idoia Mendia, la compañía presidida por José Luis Larrea, no se plantea, de momento, iniciar acciones judiciales.
Hay que tener en cuenta que el Gobierno Vasco es uno de sus clientes preferentes de Ibermática con el que han seguido prestando servicios en el departamento de Justicia que dirige Idoia Mendia, durante estos seis meses, "a pesar del clima enrarecido provocado por las actuaciones", según precisan fuentes conocedoras de la situación.
Curiosamente, la propia viceconsejera de Justicia, María Victoria Cinto, reconoció en sus declaraciones ante el fiscal Calparsoro que Ibermática había entregado y cerrado todos sus proyectos en los plazos previstos.
Ibermática, la empresa líder en tecnologías de la información que es la única de esta dimensión que tiene su sede en Euskadi en un sector dominado por las grandes multinacionales y con 40 años de experiencia, ha cerrado el primer semestre del año con buenos resultados, tanto en facturación como en resultados, a pesar de las contingencias en su actividad que le ha supuesto la actuación del departamento de Justicia y la situación de crisis económica, según señalaron fuentes de la compañía.
Entre estas contingencias, al margen del impacto en los mercados, cabe destacar los gastos derivados de la contratación de bufetes de abogados, de las horas dedicadas por numerosos profesionales para revisar una ingente cantidad de documentación interna, actas de seguimiento de proyectos, incidencias, etc., de 10 años de trabajo en un proyecto complejo como es la modernización de la Justicia.
Empresa líder Ibermática, es una empresa líder en el sector de las tecnologías de la información (TIC) del Estado, que da empleo a 3.300 personas y que tiene presencia importante no sólo en España, sino en Gran Bretaña, Portugal y todo el continente latinoamericano, hasta el punto de que en sus planes de internacionalización tiene previsto implantarse en Brasil.
Tras su última remodelación accionarial, con la venta de un paquete de Kutxabank, Ibermática está controlada por el banco de las cajas vascas que cuenta con una participación de 48,13%, mientras que la ONCE tiene el 15,12%, en tanto que Banc Sabadell, Caixabank, con la adquisición de Banca Cívica, y Caja 3 cuentan con un 11,09%, respectivamente. El restante 3,23% del capital está repartido entre diferentes accionistas.