madrid. Mariano Rajoy avanzó también ayer que el préstamo que va a recibir España de la UE para sanear el sistema financiero contará con un periodo de carencia de diez años, de lo que se deduce que no empezará a devolverlo hasta que se cumpla ese plazo. En cualquier caso, el jefe del Ejecutivo reiteró que la ayuda cuenta con condiciones muy favorables para la banca, ya que dispondrá de un "buen" tipo de interés y un plazo "muy razonable" para pagar. Rajoy confió en que la ayuda se apruebe si no hay novedades "desagradables" (tiene que aprobarse en diversos parlamentos) para que España pueda disponer de este préstamo de hasta 100.000 millones de euros en 18 meses.

El presidente se mostró contrario a una banca nacionalizada ya que a su parecer, sería absurdo dejar caer a todas las entidades porque entonces la economía "no tendría ningún futuro". "¿Los vamos a dejar caer? ¿Qué pasa con los depósitos? ¿Y los créditos?. Lo razonable es lo que hemos hecho", subrayó.