Bilbao. En la crisis abierta tras la muerte de Iñigo Cabacas, el Departamento de Interior sigue acumulando una decisión tras otra, pero sin convencer. Tras la confusión que ha rodeado las nuevas directrices para utilizar las pelotas de goma -con una sucesión de órdenes que han incluido una fecha límite para eliminar su uso en las comisarías, la suspensión temporal de su empleo por el hallazgo de material defectuoso y la colocación de un tope en la bocacha de la escopeta que limite la potencia del disparo-, ahora le toca el turno a la formación que se dará a los ertzainas sobre los nuevos lanzadores, menos lesivos que el actual material antidisturbios. Una formación que solo durará un día para cada uno de los 8.000 agentes del Cuerpo.

El Consejo Rector de la Academia de Arkaute se reunió ayer para abordar esta cuestión, cuya importancia fue destacada por el consejero de Interior, Rodolfo Ares, en su comparecencia parlamentaria del pasado martes. En la misma, afirmó que se van a contratar "por procedimiento de urgencia" los nuevos lanzadores, que dispararán unas pelotas más pequeñas y menos pesadas. El objetivo es dotar a todas las unidades de Seguridad Ciudadana de este material con la fecha límite del 1 de enero de 2013, quedando las escopetas lanzapelotas restringidas a la Brigada Móvil y Brigada de Refuerzo. En el cónclave de ayer se comunicó la pretensión de iniciar el adiestramiento en estos disparadores en mayo. El objetivo del Departamento, subrayado por el viceconsejero de Seguridad, Miguel Buen, es que entre el mes que viene y diciembre, los 8.000 agentes realicen estas prácticas. Sin embargo, este plan genera varias dudas. En primer lugar, su duración: solo un día por cada ertzaina. Además, al manejo del arma propiamente dicho se sumará una ingente formación teórica en nuevas formas de altercados públicos, control del estrés, aspectos legales, sistemas no letales y un apropiado uso de la fuerza, y utilización del material antidisturbios y medios audiovisuales.

En este punto cabe recordar que, tras la muerte de Cabacas como consecuencia del impacto de una pelota de goma, agentes se quejaron de la escasa formación que recibieron en la utilización de las nuevas escopetas que el Departamento adquirió el año pasado, que se limitaba a pegar "diez tiros" en una mañana en Arkaute.