saná. El presidente del Yemen, Alí Abdala Saleh, volvió prometer ayer a una delegación de parlamentarios del país que dimitirá tal y como reclaman con insistencia los manifestantes en su país desde principios de este año, pero que no dejará el poder en manos de la oposición, según un diputado presente en la reunión.
Inmediatamente después, la televisión yemení informó de las palabras de Saleh en esa reunión, en la que aseguró que su renuncia se producirá "en los próximos días". "Rechazo el poder y en los próximos días renunciaré a él, pero no para entregárselo a la oposición", dijo Saleh, según la televisión pública yemení.
"Hay personas entre quienes detentan ahora el poder, ya sean civiles o militares, que van a tomarlo. Es imposible que ellos saboteen el país", agregó Saleh. Para el todavía presidente yemení, "el proyecto de la oposición es un proyecto saboteador", según sus declaraciones difundidas por la televisión.
regreso por sorpresa Alí Abdala Saleh regresó por sorpresa el pasado 23 de septiembre al Yemen después de haber sido gravemente herido en un atentado contra el palacio presidencial en junio pasado y tratado de sus heridas en Arabia Saudí.
Sin embargo, nadie le cree ya a Saleh. Ni mucho menos. De hecho, el país volvió a vivir ayer nuevos episodios de violencia en la ciudad sureña de Taiz, la segunda mayor de Yemen, con enfrentamientos entre las fuerzas leales al presidente Ali Abdullah Saleh y sus opositores, según informaron medios árabes. Las tropas presidenciales bombardearon áreas residenciales donde viven políticos de la oposición, informó Al Yazira, sin que haya cifras inmediatas de fallecidos durante los tres días de disturbios en al ciudad.
En la sureña provincia de Adén, al menos cuatro soldados yemeníes resultaron heridos al explotar una bomba cerca de una comisaría de la policía, cerca del lugar donde se perpetró el mes pasado el intento de asesinato fallido del ministro de Defensa, Mohammad Nasir Ahmed, según testigos. Mientras, la web opositora Mareb Press señaló ayer que la salud del presidente empeoró significativamente desde su sorpresivo retorno de Arabia Saudí, donde estuvo ingresado, el mes pasado. "El presidente Saleh sufre varios problemas de salud, principalmente respiratorios y auditivos", señaló la web citando a una fuente de alto rango del partido del presidente. Según la fuente, la familia del presidente pidió a Arabia Saudí que le envíe un equipo médico para verlo. Al parecer, el equipo recomendó al presidente, de 69 años, que sea enviado fuera del país para recibir tratamiento médico. Esto explicaría el anuncio de la retirada del poder aunque no para entregarlo a la oposición. Saleh volvió a Yemen el 23 de septiembre tras someterse a cirugía por las heridas sufridas en un ataque contra el palacio presidencial a comienzos de junio.
más manifestaciones Mientras, la oposición de Yemen convocó ayer más manifestaciones en la capital y en todo el país en honor de la ganadora del Nobel de la Paz 2011 de esa nacionalidad, Tawakul Karman. "Llamamos al pueblo libre de Yemen a tomar las calles y rendir honores a esta gran mujer", señalaron páginas antigubernamentales.
Karman, que luchó por los derechos humanos buscando el fin del régimen de 33 años del presidente Ali Abdullah Saleh, ganó el Nobel de la Paz ayer viernes junto a la presidenta liberiana, Ellen Johnson Sirleaf, y su compatriota y activista Leymah Gbowee. Yemen vive desde febrero una revuelta popular que busca la caída del régimen y el derrocamiento de Saleh. Según cifras oficiales, al menos 1.480 personas han muerto desde que comenzaron las protestas. >efe