vitoria. En época de sombras, la luz al final del túnel se erige en principal reivindicación de una sociedad hastiada de ver cómo la tasa de desempleo crece de forma imparable y la crisis sigue cebándose, sobre todo, en las maltrechas economías domésticas. Los partidos no pueden volver la espalda a esta cruda realidad y la campaña electoral que comenzará dentro de tres semanas estará trufada de medidas dirigidas a paliar esta situación.

Así lo anticiparon el martes los candidatos a dirigir el Gobierno foral de los tres partidos con posibilidades reales de conseguirlo. El dirigente jeltzale y actual diputado general, Xabier Agirre, compartió con sus adversarios del PSE, Txarli Prieto, y del PP, Javier de Andrés, un debate organizado por la Escuela de Formación Tomás y Valiente en el que quedaron fijadas las recetas que cada formación acercará a las urnas para conciliar el apoyo de los ciudadanos.

La terna de aspirantes facilitó la labor del mediador, el director de DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, Julio Iturri, al no superar los contendientes las barreras éticas que se presuponían en la primera ocasión en que los aspirantes a gobernar el territorio alavés se sentaban juntos en una misma mesa con la campaña a la vuelta de la esquina. Juntos también repitieron el encuentro que hace cuatro años sentó en la misma mesa a idénticos debatientes -y moderador-, entonces sin una crisis que monopolizara el discurso político.

En el debate del martes, la creación de empleo a través de incentivos a autónomos y empresarios, así como un incremento en la formación que garantice la competitividad de la mano de obra alavesa se convirtieron en los lugares comunes de las tres intervenciones. Mismos objetivos sobre raíles semejantes, con la austeridad y el rigor en el gasto como principales ejes de actuación para mantener la elevada calidad de vida de los alaveses.

corrupción En su papel de oposición, las presuntas tramas de corrupción investigadas por los tribunales y por los parlamentos vasco y alavés salpicaron las intervenciones de Prieto y De Andrés con una misma voz para depurar responsabilidades. Agirre compartió la exigencia de "total transparencia" en la gestión de cada área foral, pero censuró la proliferación del "enfrentamiento estéril" y la "descalificación gratuita" entre la clase política al calor de las presuntas irregularidades y la proximidad de las urnas.

Un escueto repaso a los muertos en el armario de cada partido en forma de presuntos casos de corrupción agitó el debate, aunque sin perder el norte de ofrecer a la ciudadanía las respuestas que demanda. Agirre, Prieto y De Andrés lo hicieron de forma literal, después de recoger las preguntas de las más de cien personas que llenaban el salón.

No faltaron un cúmulo de tarjetas en las que las palabras paro o crisis predominaban en el enunciado, pero en el amplio surtido de dudas también cobró especial protagonismo el interés de la sociedad alavesa por conocer qué modelo energético plantea cada partido si logra el éxito electoral. Y es que la catástrofe en la central japonesa de Fukushima sigue desviando las miradas hacia Garoña con un resucitado debate sobre la necesidad de su clausura.

En todos los casos, la apuesta es clara por las energías renovables, aunque Agirre y Prieto destacaron la reconducción progresiva en el cambio de modelo, mientras De Andrés compartió esta opinión pero demandando que el cierre de Garoña, previsto para 2013, se base en un criterio "técnico y objetivo".

Fue sólo una parte del primer debate entre los aspirantes que sirvió para calentar motores ante la pugna que protagonizarán desde el 6 de mayo con el comienzo de campaña.