Madrid. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre (PP), desveló ayer que no hará campaña con la aspirante popular a presidir el Principado de Asturias, Isabel Pérez Espinosa, porque sigue pensando que el "mejor" candidato para la región es el exministro Alvarez Cascos. "Le dije a Isabel Pérez Espinosa que como no he cambiado de opinión sobre quién es el mejor candidato (para Asturias), no creo que le vaya a ayudar en esta ocasión", indicó Aguirre. La presidenta madrileña envió este mensaje a la candidata impuesta por la cúpula popular en la Convención que el PP celebró este fin de semana en Sevilla.

Para Aguirre y en contra del discurso de Rajoy y su cúpula Cascos "es el mejor candidato que el PP podría presentar en Asturias" para los comicios de mayo. Pero fue más allá y pidió veladamente una rectificación al equipo de Rajoy: "Ojalá que todavía hasta el 29 de marzo que se convoquen las elecciones haya tiempo para arreglarlo". Eso sí, por si acaso dijo que "tampoco estoy de acuerdo con algunas de las cosas que ha hecho el señor Alvarez Cascos".

La jefa del Ejecutivo madrileño también aclaró por qué se marchó de la Convención antes de que terminara la ponencia en la que participaba. Según dijo, "lo previsto" era que la sesión empezara a las 16.30 y terminara a las 17.45 horas, pero se retrasó, y ella tenía "un compromiso que cumplir en Madrid", por lo que pidió permiso al moderador de la mesa, Esteban González Pons, para abandonar su sitio. "Tenía una cena en Madrid y los sábados hay muy pocos AVE. Tenía billete para coger el Albia de las 18.10 porque el siguiente era a las 21 horas y ya no llegaba", explicó.

desmentido Fue la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, la encargada de hablar desde la actual cúpula. Aseguró que Aguirre habría rectificado a la tarde trasmitiendo su apoyo expreso a la candidata del partido a la Presidencia de Asturias y achacó el malentendido a personas que "quieren enfrentarnos".

Sin embargo esta postura choca con la sucesión de acontecimientos de ayer. Fue Esperanza Aguirre la primera que lanzó el mensaje disidente en una entrevista radiofónica; horas después en un acto oficial se reafirmó y poco después, la propia De Cospedal, subrayaba que la opinión de Aguirre no era "compartida por la inmensa mayoría del PP de toda España".

El hecho de que la presidenta madrileña rectificara a la tarde parece poco creíble y, en todo caso, no evita la imagen de división interna que ha provocado.