Donostia. ¿Da respuesta a la petición del grupo de Bruselas el comunicado de ETA? y si lo da, ¿lo hace en los mismos términos? Todavía estoy en un proceso de consulta para saber si exactamente todos los miembros que están representados en la Declaración de Bruselas realmente tienen una opinión unánime acerca de ello pero pienso que sí que cumple con las condiciones que fueron establecidas en la Declaración de Bruselas. Ayer (por el lunes) me manifestaba brevemente acerca de todo ello pero pienso que, en este momento, estamos ya en la pista o en el camino idóneo.

¿Le preocupa que ETA no haya declarado el abandono definitivo de la violencia? No estoy preocupado. Creo que esta es una ocasión que requiere, evidentemente, de paciencia y hay una serie de pasos que tienen que darse de forma gradual, de forma incremental, por decirlo de alguna forma. Realmente sí que ETA ha hecho aquello que le solicitamos, aquello que le pedimos y yo me siento satisfecho porque pienso que se ha cumplido por lo menos con el primer objetivo. Pero yo diría que, incluso, han ido más allá de la petición planteada realmente por el grupo de Bruselas porque observamos una serie de indicadores de una reflexión que puede conducir a un término final de la violencia. En conciencia, pienso que no hay motivo de preocupación y creo que ha sido una respuesta satisfactoria.

¿Cuando ETA se refiere a la comunidad internacional para la verificación ustedes aceptan ese papel? ¿Cómo se activa? Esta cuestión sigue siendo parte de la discusión que estoy entablando con aquellas personas que indujeron a que se redactara la Declaración de Bruselas y también con el Grupo Internacional de Contacto. Indudablemente, yo quisiera también tener la oportunidad de tener la implicación del Gobierno español. De todas formas, pienso que gracias también a este grupo internacional de contacto nosotros podemos recabar apoyos a nivel internacional suficientes y creo que también tenemos la capacidad de poder identificar a una serie de interlocutores que son personas que gozan de credibilidad, personas que son independientes, una serie de individuos que tienen la capacitación, la habilidad y la experiencia suficiente para poder canalizar este tipo de proceso y estamos en este momento entablando todo este tipo de discusión e intentando hacer esto que acabó de describir.

Por su experiencia en otros conflictos, ¿es habitual que los gobiernos respondan diciendo es un paso bueno pero insuficiente? Suele ser buena señal, ¿o no? Cada proceso de paz es singular, es único, cada proceso de paz tiene una historia y dada la que ha tenido en el País Vasco, dada también la cronología de procesos de paz anteriores y entendiendo el entorno político, el ambiente político interior que existe en España, en cierta forma también puedo entender la posición que ha adoptado Madrid. No es una posición que sea de ayuda pero tampoco indica un bloqueo. Lo que hay que hacer es tener fe, ver lo que este proceso ha aportado hasta ahora y ver lo que puede aportar a partir de ahora y creo que va a haber un cambio en determinadas actitudes que no va a manifestarse de manera pública en un primer momento.

¿Cuándo tiene previsto que le veamos por el País Vasco? Tengo una serie de planes aún por determinar con los miembros del Grupo de Contacto Internacional, que tienen que ser nombrados y presentados. La visita será en las próximas dos o tres semanas.