madrid. El presidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, José María Barreda, abrió ayer de par en par la puerta al debate sucesorio en el PSOE y censuró como "un error" que se le dé a Zapatero la posibilidad de designar a su sucesor. El barón de los socialistas manchegos señaló que no se imagina al jefe del Ejecutivo y actual secretario general del PSOE "señalando con el dedo a su sucesor", algo que, de producirse, sería, a su juicio, "un error". Barreda respondía así, en declaraciones a la cadena Ser, tras ser preguntado por si el PSOE aceptaría que Zapatero nombrara al vicepresidente Rubalcaba como sucesor.

"Yo desde luego no estaría de acuerdo, no digo en que sea o no sea Rubalcaba, sino en el procedimiento. Ya sabemos el desastre que supone el designar al sucesor", aseveró el presidente manchego. "Tienen que funcionar las normas internas del partido y la democracia interna, y (el sucesor) se tiene que elegir en primarias con los medios que están establecidos", defendió.

De este modo, argumentó que fue una "equivocación" la designación de Joaquín Almunia tras la derrota de Felipe González y también "lo fue clamorosamente" cuando José María Aznar eligió a Mariano Rajoy.

Cuestionado sobre la posibilidad de que Zapatero vuelva a presentarse como candidato del PSOE, Barreda dijo que él no puede conocer las intenciones del presidente y además, añadió, "Zapatero debe sentirse completamente libre para tomar la decisión".

Barreda insistió en que el actual jefe del Ejecutivo "no debe hacer caso ni sentirse presionado ni objetiva ni subjetivamente por su entorno, por los grupos que están a su alrededor, por la gente que tiene poder vicario, es decir, poder delegado por él y que lo que quiere a lo mejor es que continúe". "Todas esas situaciones que se generan en torno a los presidentes de los gobiernos que a veces dicen que no se pueden ir aunque quisieran, todo eso lo debería dejar a un lado, debería sentirse libre y debería pensar además en sí mismo y en sus propias intenciones", apuntó el líder de los socialistas manchegos.

El presidente de Castilla la Mancha, cuestionado por los entrevistadores sobre las dotes de mando de Rubalcaba como probable sucesor del actual presidente, respondió que para él "Zapatero y Rubalcaba van de la mano y son iguales".