vitoria. Las reacciones de la clase política y sindical vasca no se hicieron esperar tras la decisión de la Audiencia Nacional de prohibir la manifestación convocada por Adierazi EH. La respuesta más tajante partió de ELA, que en un comunicado apuntó directamente al presidente español como el culpable de la decisión adoptada por el juez Ismael Moreno. Según la central sindical, la resolución judicial responde al "impulso político" del Gobierno de Rodríguez Zapatero.

"Se trata de un hecho lamentable que lleva a pensar que en la gestión del escenario vasco son los elementos más retrógrados quienes marquen las pautas de actuación", denunció ELA, que reiteró la petición que hizo el pasado domingo al Ejecutivo español tras el comunicado de la organización armada. "Debe revisar su actual política en Euskal Herria, y tomar aquellas decisiones que más puedan contribuir a la consolidación de la distensión, a la paz y a la normalización política", destacó el sindicato liderado por Txiki Muñoz, tras denunciar que la prohibición conculca el derecho de manifestación y participación política de ciudadanos y organizaciones.

El coordinador y portavoz de la presidencia de Ezker Batua, por su parte, aseguró que la decisión de la AN ha tenido "motivaciones políticas, lo que resta toda credibilidad" a este tribunal. Serafín Llamas destacó que no había ninguna razón para prohibir esta marcha, lo que supone, a su juicio, una "vulneración del derecho constitucional a la manifestación y a la libertad de expresión". En la misma línea, varios representantes de Lokarri censuraron en una carta el axioma de "todo es ETA" y negaron que Adierazi EH siga los dictados de la organización armada: "Todos nosotros tenemos una amplia trayectoria de rechazo a la violencia y de defensa de todos los derechos humanos. Ante cualquier indicio de que ETA hubiera pretendido controlar las actividades de la plataforma no hubiéramos participado activamente en la misma".

Alternatiba, por su parte, realizó un llamamiento a la ciudadanía a salir a la calle mañana "masivamente", pese a quienes pretenden "entorpecer los procesos de paz", y criticó a la Audiencia Nacional por prohibir la marcha al considerar que se trata de "una vuelta de tuerca más". En un comunicado, la formación dirigida por Oskar Matute denunció que "la conculcación de derechos fundamentales", como los de asociación, manifestación, voto o expresión, se han convertido "en un ejercicio habitual".

en alerta En el bando opuesto, el portavoz del Partido Popular vasco, Leopoldo Barreda, aseguró que la Audiencia Nacional, al prohibir la manifestación convocada por Adierazi EH, ha hecho "lo que debía", y alertó del hecho de que los mismos convocantes quieran "burlar" la prohibición convocando otra marcha, debe merecer "la misma alerta y atención, la misma rapidez de actuación de las Fuerzas de Seguridad y de la Justicia".