CERDANYOLA DEL VALLÈS. Un grupo de jóvenes retrasó hoy 30 minutos el inicio de una conferencia del ex lehendakari Juan José Ibarretxe en la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), increpándole a la entrada de la sala al grito de "torturador" en catalán y "democracia Euskadi" en euskera, hasta que fueron expulsados por el equipo de seguridad del propio ex lehendakari.
Tras empezar el acto, sobre las 12.30, siguieron increpándole dentro de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología, pero ya fuera de la sala. Cinco jóvenes más que estaban dentro, sentados, mostraron una pancarta con la leyenda en catalán 'Vosotros fascistas', y gritaron 'Ibarretxe torturador', también en catalán.
Los aproximadamente 200 estudiantes que acudían al acto les pidieron que salieran de la sala al grito de 'fuera' y aplaudieron a Ibarretxe, incluso acercándose a la mesa presidencial como muestra de apoyo. Finalmente, los cinco jóvenes también fueron expulsados.
La conferencia 'Política y valores: relato de una experiencia' prosiguió sin más problemas, aunque el ex mandatario vasco se refirió a los hechos al principio de su discurso: "Respeto todas las críticas. Sólo soy un humilde profesor universitario".
Durante la exposición de Ibarretxe, en la que hizo una defensa de la "política de ideas y honesta", la sala permaneció cerrada, dejando fuera a numerosos alumnos que lamentaron la falta de organización y de aforo en el evento, ya que algunas clases se suspendieron para poder acudir a la conferencia. LUCHA POR LA IGUALDAD
El ex lehendakari Juan José Ibarretxe aprovechó su presencia en la UAB para avanzar que piensa comprometerse y dedicarse profesionalmente a la lucha por la igualdad entre hombres y mujeres para erradicar situaciones "vergonzosas" como el maltrato y la discriminación laboral y profesional hacia las mujeres.
Precisamente, Ibarretxe tildó el uso de la violencia como "el uso de la mediocridad" y criticó a aquellos que pretenden "demonizar" el diálogo, una actitud que, según el ex mandatario, le llevó al banquillo de los tribunales en un proceso judicial que se alargó cuatro años.
Aunque lamentó las numerosas criticas recibidas a lo largo de su carrera política, apostó por la política de "ideas, optimista y tenaz" que defiende la igualdad, la identidad y la participación, aunque "la valentía política" lleve a perder votos, elecciones y gobiernos.
Finalmente, Ibarretxe, que también se animó con el catalán, recordó que el pueblo vasco "existe" y que tiene derecho a decidir para colocar a Euskadi, el euskera y su cultura en Europa y el mundo en igualdad con el resto de culturas.
