l pasado mes de abril HETEL presentó las conclusiones de un proyecto para conocer la influencia de los estereotipos en las vocaciones de las chicas respecto a su elección por estudios STEAM. De hecho, los materiales generados para el proyecto (vídeo de la experiencia con niños y niñas de 8 años, video de las experiencias en la FP STEAM de 6 chicas, vídeo resumen, kahoot sobre los prejuicios y estereotipos, recomendaciones o conclusiones derivadas del proyecto) están a disposición de todas las personas interesadas, en www.hetel.eus.
HETEL hace público su objetivo 50/50 para 2030. Que el 50% de las personas matriculadas en formación profesional en sus centros de FP sean chicas (actualmente apenas el 30%) y que el 50% del alumnado matriculado en sus ciclos formativos STEAM corresponda, igualmente, a chicas (actualmente del 10%). Un doble reto, tan ambicioso como ineludible. HETEL irá proponiendo a otras organizaciones sumarse a esta iniciativa para que asuman el compromiso de ejecutar acciones destinadas a reducir el desequilibrio de género, ya insostenible,en la formación profesional científico-tecnológica; acciones a realizar en cada uno de los meses de los 8 años hasta el 2030. Un cuadro de mando pilotará esta iniciativa.
Durante este mes de mayo está teniendo lugar el periodo de prematriculación en formación profesional para el curso 2022-2023. Y con ello, llega la hora de la FP. Es la hora del talento femenino también en la FP y, sobre todo, en la FP STEAM. En el último informe de situación laboral que HETEL presentó de forma pública en febrero de 2022 se señalaba la alta inserción laboral de las chicas a los 6 meses de titularse en familias profesionales científico-tecnológicas, concretamente un 87% en la etapa de Grado Básico, un 75% en la etapa de Grado Medio y un 86% en la etapa de Grado Superior. Sin duda, unos valores excelentes teniendo en cuenta, además, que se refieren a diciembre de 2021, un año no precisamente estándar desde el punto de vista económico-laboral.
Llega la hora de que las chicas (y los chicos) destierren estereotipos absurdos que no provocan sino malograr proyectos, sueños, retos personales hacia ámbitos vinculados con la ciencia y la tecnología y que han sido minuciosamente concebidos, diseñados y mentalmente construidos durante años.
Llega la hora de que las chicas (y los chicos) huyan de opiniones sin un mínimo de contraste y de consejos desafortunados que provengan de personas absolutamente incompetentes y desconocedoras de lo que realmente brinda el apasionante mundo tecnológico.
Llega la hora de que las chicas (y los chicos) tengan que informarse concienzudamente, de buscar informes, estudios, noticias, conclusiones de organizaciones fiables, de escrutar e indagar en los diferentes sectores productivos de Euskadi, de su situación presente y futura, de las oportunidades que ofrece, tanto profesionales como personales. En este sentido, hay que poner en valor la figura que los centros de FP ofrecen para este conocimiento y es la que representa la persona responsable de contactar con empresas (cientos en cada centro, miles en su conjunto) para la organización de las prácticas en ellas, del alumnado de segundo curso (y ahora, también de primer curso de los diferentes ciclos formativos), para identificar proyectos de colaboración, para intervenir en el proceso formativo...
Llega la hora de que las chicas (y los chicos) reflexionen sobre la estrecha ligazón de la tecnología con la vida de las personas, en ayudar a mejorar su calidad de vida, las de las personas jóvenes y las de las personas maduras. Hay tanto que la ciencia y la tecnología hacen y seguirán haciendo y contribuyendo al bienestar de las personas que bien merece dar una oportunidad a considerar los ciclos formativos tecnológicos y científicos como una opción real de servicio a la sociedad. Me permito el ejemplo de un quirófano, un espacio para ayudar a mejorar la salud de las personas, un espacio repleto de máquinas y equipos que hay que idear, diseñar, construir, montar, preparar, programar, mantener, mejorar... tecnología al servicio de las personas.
Llega la hora de que las chicas (y los chicos) encuentren referentes cercanas, imperfectas pero reales (de carne y hueso, con nombre y apellidos y no tanto virtuales, lejanas y sin identidad clara), pioneras, valientes, con las que hablar, debatir, resolver dudas e incertidumbres, desterrar prejuicios y cargarse de razones poderosas e ilusionantes sobre la formación profesional científico-tecnológica.
Son diez días para dar una oportunidad a la formación profesional, para realizar la prematrícula en una FP excelente, diversa y que ofrece alternativas reales y magníficas oportunidades para todas las personas jóvenes y no tan jóvenes. Es el momento de que las chicas destrocen la puerta tecnológica de la formación profesional de Euskadi e irrumpan con determinación, con valentía, con pasión y, sobre todo, con talento. ¿Dónde está escrito que una chica no pueda ser programadora de robots o experta en fabricación avanzada?
El momento es ahora. Es la hora de la FP.
Así lo pensamos, al menos, en HETEL. l
* Presidente de HETEL - Asociación de centros abantean de FP de Euskadi