Acabo de leer que la Comunidad de Madrid va a destinar 1,5 millones de euros para instalar medidores de CO2 en las aulas. Los expertos dicen que son la única herramienta fiable para medir la calidad del aire. El aire siempre tiene que entrar del exterior y salir al exterior para que se vaya limpiando. La única forma de comprobar que la ventilación por medio de las ventanas es correcta es a través de los medidores de CO2.Tengo una amiga que es profesora en un instituto y me dice que surgen muchas discusiones tanto entre los profesores como con los alumnos cuando se quieren abrir las ventanas. Cuando los profesores no tienen clase, van a la sala de profesores a preparar sus clases y es allí cuando surgen los problemas porque algunos quieren abrir las ventanas pero otros no y entonces el ambiente se vuelve tenso. Lo mismo ocurre cuando los profesores van a dar clase: los alumnos ponen pegas para abrir las ventanas, dicen que pasan frío y que así no pueden estudiar (y eso que todavía no ha entrado el frío de verdad).Si el Gobierno Vasco, al igual que lo va a hacer la Comunidad Autónoma de Madrid, instalara estos aparatos en las aulas y en las salas de profesores, se acabarían las discusiones porque sería el aparato quien avisaría cuándo está el ambiente cargado y es necesario renovar el aire abriendo las ventanas. Creo que si se instalan estos aparatos, mejoraría no solamente la seguridad de los centros educativos sino que mejoraría también el ambiente cada vez más crispado que se está viviendo en las aulas y en las salas de profesores. Aitziber Garramiola
