El último baile del fondista eibartarra Asier CuevasFelix Sanchez Frente
Alejado de la competición desde hace varias temporadas, hay quien ya lo ha retirado antes de tiempo. Pero no es así. Todavía no. El mejor corredor de ultramaratón vasco tiene un as en la manga. A sus 52 años, Asier Cuevas Ettcheto confía en dejar atrás sus problemas musculares para ofrecer un “último baile” y culminar así su epopeya con una nueva machada. “Evidentemente, por la edad no llegaré al nivel anterior, pero estoy convencido de que puedo seguir siendo competitivo”, comenta. Entre su abultado palmarés, destacan el primer puesto en el campeonato de Europa de 100 kilómetros disputado en Belves, Francia, en 2013 (“fue una carrera muy dura”, recuerda) y la medalla de plata de 2015 en el Mundial de Winschoten, Holanda. Cuevas, que empezó reinando en la maratón, explotó con las distancias superiores a los 42 kilómetros.
¿Qué sentido tiene correr 100 kilómetros de una tacada? “En mi caso, era un gusanillo que tenía dentro de mí”, responde entre risas. Le habían hablado de la ultramaratón de Comrades de Sudáfrica, fundada en 1921 en memoria de los soldados sudafricanos caídos en la Primera Guerra Mundial, de aproximadamente 90 kilómetros. Sentía que su carrera se había “estancado” desde que en 2009 le “cerraron la puerta” de la selección española, a pesar de haber alcanzado el sexto puesto en el ranking estatal. “Quería estirar un poco más mi carrera deportiva y la de los 100 kilómetros ha sido la distancia a la que mejor me he amoldado”, explica. Su cuerpo rinde mejor en las largas distancias: “Mi nivel en maratón y en una carrera de 10.000 metros no tiene nada que ver”.
Nació por casualidad en Vitoria-Gasteiz, pero ha vivido toda la vida en Eibar. Su segundo apellido, Ettcheto, viene de la localidad de Iparralde de Sara. “Soy eibarrés de pura cepa”, afirma. Entrena todos los días de la semana, donde realiza un total de entre siete y nueve sesiones. El domingo, el día grande para el corredor, aprovecha para madrugar y completar un recorrido de “no más de 55 kilómetros”. Se dice pronto. Asier es un deportista querido por otros deportistas y también es profeta en su tierra. Todos los años se disputa la Carrera Popular Asier Cuevas por las calles eibarresas, de 7,5 kilómetros, con salida y llegada en la sede del Club Deportivo Eibar.
Asier Cuevas es maestro industrial en el centro tecnológico y de investigación Tekniker
Cuando no corre, trabaja. Y le gusta lo que hace. Es maestro industrial en el centro tecnológico y de investigación Tekniker, donde realiza proyectos de máquina herramienta, bancos de ensayos e instrumental científico, y explota su creatividad partiendo muchas veces de cero “con cosas que no existen”. Si tuviera que elegir un solo proyecto de todos los que ha llevado a cabo en Tekniker, lo tiene claro: el desarrollo del patrón nacional de presiones para el Centro Español de Meteorología (CEM). “Fue un trabajo en equipo y lo diseñé yo”, declara orgulloso. El edificio blanco de la empresa destaca en la entrada de la localidad eibarresa desde la carretera AP-8 sentido Bilbao. “Las vistas son muy bonitas. Se ve Arrate”, dice. El escaso tiempo libre que le queda lo dedica a disfrutar de su familia. Es metódico y organizado.
Cuando corre dice que ahuyenta “los malos espíritus”, libera su mente, es feliz. Gran amante de la gastronomía, no conoce otro tipo de vida. Una vez, de vacaciones en los Alpes, bajó al camping del Täsch suizo y salió a correr por ahí. Se encontró con unos alpinistas riojanos, que le dijeron: “¡Chaval, pero cuando vas a parar de correr!”. “Seguiré hasta que el cuerpo me diga que pare”, afirma. Y después, cuando ya no pueda más, no se va a quedar quieto en el sofá de su casa: “Me subiré a una bicicleta”.
Espíritu montañero
Picos. En la segunda mitad de los 90 veraneaba en los Alpes. Ha alcanzado unas 40 cumbres por encima de los 4.000 metros y varios tres miles en los Pirineos.
Pasión. Su primer entrenador, Roberto Aguirregomezcorta, fallecido en 1993, gran aficionado a los deportes de montaña, le contagió su pasión. Cuevas practica esquí de fondo y hace senderismo con asiduidad.