La oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, emitió un comunicado esta madrugada anunciando que en los próximos días funcionarios se reunirán para discutir la propuesta de alto el fuego en Líbano mediada por EE.UU. y Francia, y reiteró el objetivo "compartido" de volver a sus casas a los 60.000 desplazados del norte.

"Nuestros equipos se reunieron (el jueves 26 de septiembre) para analizar la iniciativa estadounidense y cómo podemos avanzar en el objetivo compartido de que las personas regresen de manera segura a sus hogares", detalla el comunicado, que explica que fue a principios de semana cuando EEUU compartió con Israel "su intención" de presentar un acuerdo junto a otros socios.

"Continuaremos esas conversaciones en los próximos días", añade el texto. En el comunicado, Israel dice apreciar los "esfuerzos" de EEUU, al que califica como "indispensable para promover la estabilidad y la seguridad en la región".

Asamblea General de la ONU

Estas palabras se producen después de que ayer, nada más aterrizar en Nueva York, donde Netanyahu intervendrá hoy ante la Asamblea General de la ONU, el mandatario reiterase que Israel "seguirá golpeando a Hizbulá con todo su poder" hasta alcanzar todos los objetivos, según declaraciones a los periodistas en la misma pista del aeropuerto.

El miércoles, una iniciativa de Estado Unidos y Francia, además de otra decena de países, propuso un alto el fuego de 21 días en la frontera de Israel y Líbano, durante el que también se promoverían las negociaciones para la liberación de rehenes y una tregua en Gaza.

Ayer, después de que la prensa, incluso la israelí, insinuase que el acuerdo era inminente, la oficina del primer ministro dijo en un primer comunicado que Netanyahu había dado instrucciones antes de su viaje para que "continuaran los combates con toda su fuerza y de acuerdo con los planes (castrenses) que le fueron presentados a él".

Además, en referencia al enfrentamiento bélico en la Franja de Gaza, a raíz del cual Hizbulá inició sus ataques contra el norte del Israel el pasado 8 de octubre, el comunicado insistió en que Israel solo le pondrá fin "cuando se logren todos los objetivos de la guerra".

Solo en los masivos bombardeos israelíes de ayer, al menos 92 personas murieron y otras 153 resultaron heridas en el Líbano, concentrados en el este y el sur del país, pero también en ataques contra los suburbios sur de Beirut, según el Ministerio de Salud Pública.

Líbano exige el fin de la "ocupación"

El ministro de Exteriores de Líbano, Abdalá Bou Habib, ha enfatizado este jueves ante la Asamblea General de la ONU que la solución a las tensiones regionales, que han llevado a Israel a realizar unos bombardeos que han dejado casi 700 muertos en territorio libanés en lo que va de semana, es precisamente el final de la "ocupación" israelí.

"Lo que vivimos hoy es la ausencia de una solución sostenible. Esto es una consecuencia, no es la causa. La causa es la ocupación. Y no hay otra explicación. Afirmar otra cosa sería una pérdida de tiempo. Siempre que haya ocupación habrá inestabilidad y habrá guerra", ha enfatizado Habib durante su intervención.

Efecto dominó

Tras ello, ha pedido a la comunidad internacional que actúe de forma "urgente" para evitar que la actual situación "se salga de control y se produzca un efecto dominó que haga imposible contener esta crisis" que "se transformará en un agujero negro que engullirá la paz y la seguridad internacionales".

"La crisis en Líbano amenaza a todo Oriente Próximo con lo peor si la situación continúa como está actualmente y si el mundo permanece inmóvil", ha insistido.

De igual forma ha cargado contra Israel por "radicalizarse continuamente" y por extender la guerra a territorio libanés, donde se está dando la "destrucción sistemática de las aldeas", un "castigo colectivo contra la población" y el "incendio de tierras agrícolas con fósforo blanco".

Además, ha hablado sobre la "detestable" y "repugnante" explosión de 'buscas' y de otro tipo de aparatos electrónicos de comunicación, supuestamente pertenecientes a miembros del partido-milicia chií libanés Hizbulá, que "costó la vida a decenas de personas, incluidos niños y mujeres, y causó miles de heridos, cientos de ellos en estado crítico".

El jefe de la diplomacia libanesa también ha recordado que su Gobierno ha intentado resolver las disputas fronterizas con Israel en numerosas ocasiones y que este país "ha eludido constantemente la cuestión" o "ha hecho caso omiso del asunto".

En ese sentido, ha reiterado su compromiso con una solución basada en las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, la Carta de Naciones Unidas y en el Derecho Internacional.

"El regreso de las personas desplazadas israelíes a sus ciudades y sus asentamientos no puede lograrse mediante la guerra, no puede lograrse mediante bombardeos, combates, hostilidades o el desplazamiento del pueblo libanés", ha agregado.