El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha subrayado este miércoles que no hay "plan de paz" alguno con Ucrania si no tiene en cuenta el actual estatus de las cuatro regiones ucranianas anexionadas recientemente tras la celebración de unas dudosas consultas populares que no han sido reconocidas más allá de Moscú y Minsk.

Las palabras de Peskov son en respuesta a unas declaraciones del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, sobre un proyecto de paz que pretende presentar en febrero en el seno de Naciones Unidas.

En ese sentido, Peskov ha señalado que "para empezar, hasta el momento, no existe un 'plan de paz' ucraniano de ningún tipo" y que no será posible "si no se tiene en cuenta la nueva realidad" de las cuatro regiones -Lugansk, Zaporiyia, Jersón y Donetsk- que han acabado "uniéndose a Rusia".

"Cualquier plan que no tenga en cuenta estas particularidades no puede pretender ser un plan de paz", ha zanjado el jefe de prensa del presidente ruso, Vladimir Putin, en relación a una cuestión que desde Kiev ya han señalado que no asumirán bajo ninguna circunstancia, informa la agencia TASS.

RECHAZO DE "NUEVOS TERRITORIOS"

Por su parte, el secretario del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania, Oleksei Danilov, ha rechazado la afirmación de Peskov sobre la existencia de "nuevos territorios" dentro de Rusia, en alusión a las mencionadas regiones.

"Es hora de que las cabezas parlantes del Kremlin salgan del estado de delirio informativo. Las realidades de Rusia son la vergüenza, la derrota y el colapso", ha manifestado en Twitter un Danilov que apuesta por tener en cuenta también estas "realidades" a la hora de negociar.

Sin embargo, el secretario de Seguridad Nacional de Ucrania ha advertido de que "comunicarse con los demonios" tan solo puede conducir a "una desafortunada caída fuera de la realidad".

Esta semana, Zelenski contó que entre las cuestiones que había abordado con su par estadounidense, Joe Biden, en su reciente visita a Washington fue una propuesta de Kiev para celebrar a finales de febrero una "cumbre de paz" en el seno de Naciones Unidas, pero sin la presencia de Rusia.