- Los ministros de Exteriores de la OTAN mostraron ayer su acuerdo para que ningún avión aliado sobrevuele el espacio aéreo de Ucrania ni que entren allí sus tropas, con lo que descartaron así la posibilidad de que la Alianza contribuya a imponer una zona de exclusión aérea sobre el país, tras la petición formulada por Kiev en tal sentido.

El secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, indicó al término de una reunión extraordinaria de los ministros que la posibilidad de una zona de exclusión aérea “se mencionó” pero que, “al mismo tiempo, los aliados acordaron que no deberíamos tener aviones de la OTAN operando en el espacio aéreo ucraniano o tropas de la OTAN en el territorio ucraniano”. “No queremos ser parte del conflicto con Rusia en Ucrania”, zanjó Stoltenberg.

El secretario de la OTAN dijo entender la “desesperación” de los ucranianos, pero recordó que la única manera de que la Alianza implementase una zona de exclusión aérea sobre Ucrania sería entrando en su espacio aéreo, lo que “podría suponer la guerra en Europa”. “La nuestra es una alianza defensiva, no buscamos conflicto, pero si el conflicto viene a nosotros, estamos preparados para ello y defenderemos cada centímetro del territorio de la OTAN”, puntualizó el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken.

Los aliados decidieron además reforzar la coordinación y la información que comparten sobre esta crisis con Finlandia y Suecia, países que ayer asistieron como invitados a la reunión.

Asimismo, discutieron la necesidad de apoyar a otros “socios que puedan estar en riesgo”, entre ellos Georgia y Bosnia-Herzegovina, donde “vemos una situación muy frágil e inestable, con retórica inflamatoria y graves peligros para la unidad de ese estado”.

Stoltenberg afirmó que esos países son muy diferentes entre sí pero que tienen en común, al igual que Moldavia, que “Rusia está ejerciendo su poder para intimidarlos”.