La Policía de Ottawa empezó este viernes a detener a manifestantes antivacunas que desde el 29 de enero bloquean el acceso al Parlamento de Canadá, en el centro de la capital.
En un mensaje en Twitter, la Policía informó de que hay un amplio despliegue de agentes en la calle de Nicholas, en el centro de la ciudad, y de que pidió a los manifestantes que abandonen el lugar inmediatamente. Lo que se entregaron a las autoridades están siendo detenidos.
La Policía recordó a los manifestantes que, de acuerdo con la legislación federal y provincial, quienes no abandonen inmediatamente el lugar y retiren sus vehículos de la calle se enfrentan a "sanciones severas".
La Cámara de los Comunes (que junto al Senado conforma el Parlamento canadiense) suspendió este viernes su sesión precisamente para evitar posibles incidentes mientras dura la operación policial.
El centro de Ottawa permanece confinado por la Policía y sólo se puede acceder a él pasando por alguno de los puntos de control fijados por las autoridades para prevenir que más manifestantes se sumen a la concentración.
El miércoles, la Policía ya avisó de que el bloqueo con camiones de los manifestantes antivacunas en el centro de la capital canadiense es "ilegal" y les advirtió de que serían arrestados si no levantaban su protesta.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, invocó el lunes la Ley de Emergencias que da al Gobierno poderes extraordinarios para acabar con las protestas, que se habían extendido por varios cruces fronterizos con Estados Unidos.
La Ley de Emergencias permite a las autoridades incautar los camiones de la protesta y procesar a quienes viajen a la capital para sumarse al bloqueo.
Los antivacunas pueden enfrentarse a multas, pueden perder sus licencias de conducir (muchos de ellos son camioneros) y se les puede negar cruzar la frontera con Estados Unidos.
El jefe de Policía de Ottawa, Peter Sloly, dimitió el martes tras varios días de críticas por la incapacidad del cuerpo para controlar el bloqueo de más de 400 camiones y centenares de personas contrarias a las medidas sanitarias contra la pandemia de covid-19.