- El primer Ministro tunecino, Elyes Fakhfakh, presentó ayer su dimisión tras varias semanas de polémica por su supuesta implicación en un delito de corrupción, y sumió al país en una grave crisis política que se suma a económica y social que desde hace meses padece Túnez.
Según la radio local Mosaïque FM, el jefe del Ejecutivo ofreció su renuncia tras una reunión en el palacio de Cartago con el presidente de la República, Kais Said, el presidente del Parlamento y socio de Gobierno, Rachid Ghannouchi y el secretario general de la UGTT, principal sindicato del país e importante mediador político, Noureddine Tabboubi.
Según la Constitución, el presidente dispone ahora de una semana para designar un sustituto, que deberá lograr el apoyo de la mayoría absoluta del Parlamento en el plazo máximo de un mes y elegir un nuevo gobierno.