Quito - El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, dispuso ayerel estado de excepción en el país, en momentos en que los transportistas habían bloqueado calles y carreteras en varias zonas del país en rechazo al incremento del precio de los combustibles. “Con el fin de precautelar la seguridad ciudadana y evitar el caos, he dispuesto el estado de excepción a nivel nacional”, dijo Moreno desde el palacio de Carondelet, sede del Ejecutivo.
El anuncio lo hizo en momentos en que arreciaban las manifestaciones, especialmente en la capital ecuatoriana, en contra de la eliminación de los subsidios a los combustibles. “Los derechos se exigen sin perjudicar a los que verdaderamente son fundamentales para el progreso del país, la generación de trabajo, la educación, la libre movilidad, la seguridad de las personas”, señaló el gobernante. Según la ministra de Gobierno, María Paula Romo, el estado de excepción es para garantizar el normal desenvolvimiento del país, donde ayer se registraron varias marchas de protestas, algunas de ellas violentas. Según Romo, se registraron once detenciones por las manifestaciones que comenzaron a la madrugada cuando entraron en vigor los nuevos precios.
El pasado martes, Moreno firmó un decreto para eliminar desde ayer los subsidios al diésel y a la gasolina “extra”, con lo cual el precio estará ahora en función de los valores internacionales Y en ese sentido, los escenarios que se prevén denotan que el galón de diésel podría pasar de 1,03 dólares a 2,27, mientras que la gasolina extra, de 1,85 a 2,30 dólares. A las manifestaciones de los transportistas se sumaron organizaciones sociales, indígenas y estudiantes universitarios que rechazan lo que tildan de “paquetazo”. - Efe