Berlín - El presidente del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD), Martin Schulz, dimitió ayer con efecto inmediato y la dirección de la formación propuso como sucesora a Andrea Nahles, jefa de su grupo parlamentario en el Bundestag (cámara baja). El doble anuncio busca calmar las convulsiones que ha provocado dentro del SPD el acuerdo con el bloque conservador de la canciller Angela Merkel para formar una nueva gran coalición en Alemania y las rectificaciones de Schulz a este respecto, que han afectado a su credibilidad y abierto un grieta en el partido.
Schulz, que había avanzado previamente que dejaría el partido en marzo por el descontento interno con su gestión y había señalado a Nahles como delfín, afirmó en una breve comparecencia ante los medios que adelantaba su salida. El SPD precisa una “renovación” tanto en lo “personal” como en lo “programático”, argumentó Schulz, que consideró que su dimisión valdría la pena si contribuía a ello.
Nahles, miembro de la dirección socialdemócrata y ministra de Empleo en la pasada legislatura, aseguró en una comparecencia posterior que asumía la candidatura “encantada”, algo que consideró “un gran honor” y una “gran responsabilidad” con Alemania y con su partido. La socialdemócrata aseguró que su primera tarea será “defender” el acuerdo de Gobierno al que el SPD y el bloque conservador de la canciller Angela Merkel llegaron la semana pasada.
La candidata oficial a la presidencia del SPD agradeció además a Schulz su “dolorosa decisión”, que tras un período turbulento ha dejado “camino libre” para un “nuevo inicio”, y destacó que de esta forma el partido manda una “señal” sobre lo que realmente es “esencial”.
El partido informó de que el 22 de abril se celebrará en Wiesbaden (oeste del país) un congreso extraordinario para que el SPD elija a su nuevo presidente. Mientras tanto, el alcalde-gobernador de la ciudad-estado de Hamburgo (noroeste) y miembro de la dirección del partido, Olaf Scholz, quien se cree que asumirá Finanzas en el próximo Gobierno, tomará de forma interina las riendas del SPD.
unanimidad Schulz, que hizo estas declaraciones tras una reunión de más de tres horas con la dirección, aseguró que Nahles tiene un “amplio apoyo” en el partido y que ha sido nominada de forma “unánime” por la cúpula. Añadió que su salida pretende asimismo que los afiliados del SPD puedan centrarse ahora en estudiar el acuerdo de gobierno alcanzado la semana pasada entre socialdemócratas y conservadores, que la militancia debe aprobar en breve en un referéndum vinculante.
“Se está desviando la atención del acuerdo de coalición a la cuestión personal”, advirtió el socialdemócrata respecto a las polémicas sobre quiénes accederán a los seis ministerios que ha obtenido el SPD en el reparto. El acuerdo de Gobierno es “bueno”, señaló Schulz, quien agregó que “un 60 %” de sus 177 páginas contiene políticas socialdemócratas. El texto puede ser la base sobre la que el partido vuelva a crecer, argumentó Schulz, quien dijo que el pacto con los conservadores de Merkel puede suponer un “punto de inflexión” para Alemania y la Unión Europea.
El hasta ahora presidente socialdemócrata señaló con respecto a su breve mandato, de apenas diez meses, que ha desempeñado el cargo “encantado”, aunque reconoció que su período al frente del SPD ha tenido sus “altos y bajos”.
“Me voy sin amargura y sin resentimiento”, afirmó el único líder del SPD en sus 150 años de historia que ha sido elegido en un congreso por el 100 % de los delegados. En las elecciones del 24 de septiembre el SPD obtuvo su peor resultado en unas federales desde 1949, al lograr solamente el 20,5 % de los votos.