Gaza - El movimiento islamista Hamás, que gobierna en Gaza desde que expulsó a las fuerzas leales a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en 2007, anunció ayer que disolverá el Comité Administrativo para gestionar el enclave y que acepta celebrar elecciones generales.
El grupo anuncia la disolución del comité administrativo creado en marzo de 2016 para gestionar el territorio, tal como exigía el presidente palestino, Mahmud Abás, e “invita al gobierno de consenso encabezado por (el primer ministro) Rami Hamdala a venir a la Franja para llevar a cabo su misión y su deber de inmediato”, aseguró en un comunicado enviado en la madrugada de ayer a la prensa.
El tercer punto del escrito anuncia que el movimiento islamista “acuerda celebrar elecciones generales”, que no se realizan en los territorios palestinos desde 2006 por la incapacidad de Fatah y de Hamás de ponerse de acuerdo para celebrarlas simultáneamente en Cisjordania y Gaza. Y añade también que “está dispuesto a aceptar la oferta egipcia para un diálogo con el partido Al Fatah para la implementación del Acuerdo de El Cairo”, firmado en 2011 y que establece pautas para la reconciliación.
Ese pacto, al que se adhirieron las once facciones palestinas y que no llegó a implementarse, devolvía el poder de gestión administrativa del territorio a la ANP, si bien mantenía parte del poder de Hamás en el aparato de seguridad y policial. Entre otras medidas, se establecía un control mixto de los puestos fronterizos y la absorción de los agentes de seguridad de Hamás en la nueva Policía que se formase.
La decisión anunciada por Hamás pone a los palestinos en la senda de la reconciliación. Hasta ahora, el movimiento había rechazado disolver el comité administrativo, tal y como le exigía el presidente Abás, hasta que este pusiese fin a las medidas destinadas a asfixiar la franja hasta que Hamás devolviese el poder, que han aumentado la crisis eléctrica y económica en el territorio en los últimos meses.
La decisión de ayer sigue al acuerdo esta semana pasada de reconciliación entre las familias de los alrededor de 400 que murieron en los enfrentamientos armados entre ambos grupos, en junio de 2007. El comunicado aseguró que hace este anuncio “en respuesta a los esfuerzos egipcios para lograr la reconciliación y fin de la división palestina”.
cautela Palestinos e israelíes observan con cautela el anuncio de Hamás con el que amaneció ayer la región, que abre la puerta una aproximación al Ejecutivo del presidente Abás. “Hamás disuelve el Comité Administrativo e invita al Gobierno de consenso del primer ministro Rami Hamdala a venir a la Franja de Gaza de inmediato para llevar a cabo su misión y su deber”, decía el comunicado difundido desde El Cairo por los islamistas y que podría ser el principio del fin de una década de división política.
Por el momento, es el resultado a las negociaciones para explorar vías hacia la reconciliación en las que han trabajado Hamás y mediadores egipcios desde hace una semana en la capital egipcia, y a las que se sumó el pasado viernes una delegación de Al Fatah enviada por Abás.
Sin embargo, no es la primera vez que ambas partes protagonizan un acercamiento que finalmente ha hecho aguas, como ocurrió en 2007 en La Meca, en 2011 en El Cairo, en 2012 en Doha o en 2014 en Gaza. Todos, procesos incompletos que terminaron rompiéndose por las diferencias de las partes sobre cuestiones tan fundamentales como la celebración de elecciones generales (las últimas presidenciales fueron en 2005 y las legislativas en 2006) o quién debe encargarse del control de la seguridad en Gaza.
El exdirector de la Mesa Palestina del Ministerio israelí de Asuntos Estratégicos, Kobi Michael, cree que Hamás ha dado “un paso político inteligente” porque “le tira la pelota a la Autoridad Nacional Palestina y a Abás”, explicó ayer en una rueda de prensa telefónica. Según Michael, la invitación de Hamás a que el Gobierno palestino entre en la Franja es una oferta a tomar “responsabilidad (...) Ponen sobre los hombros de la ANP la reconstrucción de Gaza” mientras los islamistas se reservan las cuestiones de seguridad.
En su opinión, Hamás estaría de acuerdo en celebrar elecciones porque ve la posibilidad de vencer sobre Abu Mazen (apelativo para Abás) y el partido que encabeza, Al Fatah, que podría estar “en riesgo”.
Pero no confía en que finalmente el gesto cristalice. “La probabilidad de que esta vez esto se materialice es baja, porque Hamás no va a dejar su control en la Franja, y eso lo sabe Abu Mazen y sabe que su Gobierno allí estaría lisiado. No estoy seguro de que la ANP y Abu Mazen estén dispuestos a retomar la reconstrucción de Gaza y no creo que quieran ser acusados de fracasar”, señaló el analista.
“han madurado” El profesor de Ciencias Políticas en la Universidad egipcia de Al Zahar, Naji Shurab, dijo a Efe que la decisión de disolver el comité gestor “es inteligente” y “muestra claramente que Hamás ha madurado políticamente”. Y considera que si este nuevo esfuerzo no sale adelante, “Hamás tiene otras opciones que la reconciliación con Abás”, como un acuerdo con Dahlan “y el fortalecimiento de las relaciones con El Cairo. En ambos casos, no pierde nada”.
Por el momento se repiten los interrogantes sobre cómo podría salir adelante este proceso y hasta ahora el gobierno de la ANP y el presidente palestino -que en los próximos días tiene previsto entrevistarse con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y dar un discurso ante la Asamblea General de la ONU-, no se han comentado de manera oficial el anuncio.