Beirut - Los últimos combatientes de facciones armadas que quedaban en la ciudad central siria de Homs la abandonaron ayer, en aplicación de un acuerdo con las autoridades para pacificar definitivamente esta urbe.

Homs, que recibió el sobrenombre de la “capital de la revolución” tras el inicio de las protestas contra el régimen de Bachar al Asad en marzo de 2011, fue en los primeros tres años de la guerra una de las poblaciones sirias más castigadas por los enfrentamientos y los bombardeos.

El gobernador de Homs, Talal al Barazi, destacó que durante esta jornada un total de 739 personas, entre milicianos y civiles, salieron del distrito de Al Waer, en el noroeste de la población, tras un asedio de tres años.

evacuación Según las cifras proporcionadas por el responsable político, un total de cien combatientes desarmados y 172 pertrechados con armas ligeras fueron evacuados de Homs, así como 447 mujeres y menores y 20 heridos, que fueron trasladados en ambulancias de la Media Luna Roja Siria.

“Los hombres armados se han dirigido a zonas de Idleb y Hama”, en el norte del país, precisó Al Barazi. El activista de la opositora Red Sham en Homs, Samer al Homsi, elevó el número de evacuados de Al Waer a 750. Detalló que entre ellos hay 160 familias, con 210 niños, 300 milicianos y 30 pacientes con amputaciones y casos de polio.

Dentro del grupo de combatientes, hay al menos 80 que pertenecen a facciones próximas al grupo terrorista Estado Islámico (EI) y al Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda.

Según Al Homsi, los guerrilleros se dirigieron en 16 autobuses a Al Suqailabiya, en Hama, donde fueron entregados al Movimiento Islámico de los Libres de Sham, una organización salafista que suele colaborar con el Frente al Nusra, en la ciudadela de Al Madiq. Desde allí se espera que se trasladen a áreas en el norte de la vecina provincia de Idleb.

Mientras, en el interior de Al Waer, “se respira un ambiente positivo, la gente está en la calle y se siente contenta”, apuntó el activista Mohamed Oglu, residente en ese distrito.

Oglu manifestó su esperanza de que la normalidad regrese al lugar, donde reina la devastación, ya que, señaló, la mitad del barrio está destruido por la violencia. Con la salida de los combatientes, que ha estado supervisada por la ONU, culmina la primera etapa del acuerdo alcanzado la semana pasada entre las facciones armadas de Al Waer y las autoridades sirias.

Ese pacto contempla, asimismo, la entrada de ayuda humanitaria en el distrito, la liberación de prisioneros en manos de los rebeldes, el restablecimiento de las instituciones públicas en Al Waer y la apertura de un paso para la entrada y salida de civiles.

Varios camiones con comida y asistencia humanitaria accedieron el jueves y el sábado, mientras que un número indeterminado de prisioneros fueron puestos en libertad ayer por los opositores en Al Ganto, en el norte de Homs y controlada por los rebeldes, indicó Al Homsi.

A partir de la próxima semana, las autoridades permitirán la entrada de civiles a Al Waer, que antes tenía unos 70.000 habitantes. - Efe