Caracas. El líder opositor venezolano Henrique Capriles Radonski presentó ayer un recurso legal para impugnar las elecciones del 14 de abril, en las cuales fue declarado ganador el presidente Nicolás Maduro por estrecho margen. El recurso fue presentado ante la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que deberá fijar los lapsos para la entrega de las pruebas que avalan la reclamación.
Por su parte, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró que si hubiera perdido por un voto lo habría reconocido pese a que ello significara fallarle al fallecido Hugo Chávez. "Yo sabía la verdad, y cuando dije días antes si gano por un voto gano y si pierdo por un voto pierdo, yo sabía lo que estaba diciendo", indicó Maduro en un acto del Ejecutivo en el estado Miranda, que gobierna el líder y excandidato presidencial opositor, Henrique Capriles.
Perder "sería fallarle al jefe" "Gané por mucho más de un voto, casi 300.000 votos, pero si pierdo por un voto, entrego y así lo hubiera hecho con el dolor en el alma", afirmó, al preguntarse qué hubiera pasado "con ese dolor en este cuerpecito que está aquí", al referirse a sí mismo. "Quién sabe si uno puede aguantar tanto dolor", continuó, al mencionar que una derrota hubiera significado "fallarle al jefe". Señaló que en caso de haber perdido "el pueblo se hubiera alzado, pero yo tenía que cumplir con la Constitución, hubiera cumplido, hubiera reconocido la derrota", añadió. Nuevamente volvió a justificar el apretado resultado y la ventaja de apenas 225.000 votos sobre Capriles en que los votantes del chavismo no fueron a votar por "tristeza" o "triunfalismo", a pesar de que la participación fue prácticamente idéntica a la de las elecciones de octubre.
Ante esta texitura, la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) manifestó ayer su disposición a facilitar el diálogo entre el Gobierno y la oposición para superar el momento de polarización política que vive el país tras las elecciones del 14 de abril. "Creemos con toda verdad que esa es nuestra misión, dialogar, ayudar al diálogo, ayudar a la reconciliación, ayudar a encontrar caminos para la paz, así que estamos dispuestos a contribuir a facilitar ese diálogo entre las dos mitades", indicó el presidente de la CEV, el obispo Diego Padrón, a periodistas. Previamente, Padrón leyó un comunicado en el que la CEV llamó a todos los venezolanos a "una reflexión serena con una actitud de respeto y de diálogo" ante la situación que vive el país.
Los obispos también se refirieron a la pelea del martes en la Asamblea Nacional (AN), entre diputados de la oposición y chavistas después de que el presidente de la Cámara, Diosdado Cabello, negara nuevamente el derecho de palabra a los legisladores opositores y estos mostraran una pancarta denunciando un "golpe" al Legislativo. "Las agresiones físicas de algunos diputados en la AN son un acto de violencia que causa tristeza y vergüenza, Venezuela no se merece espectáculos tan bochornosos". Padrón agregó que "hechos como estos desnaturalizan la identidad del Parlamento".