Islamabad. Los destinos de Pakistán y la familia Bhutto vuelven a confluir en la persona de Bilawal Bhutto Zardari, hijo del actual presidente paquistaní, Asif Alí Zardari, y de la primera ministra Benazir Bhutto, quien aprovechó ayer el quinto aniversario del asesinato de su madre para pronunciar su primer gran discurso ante la nación asiática. Benazir Bhutto falleció el 27 de diciembre de 2007 al término de un mitin electoral en un atentado suicida en la ciudad de Rawalpindi, cerca de Islamabad, dos meses después de haber regresado a Pakistán desde el exilio.

Bilawal Bhutto, educado en Oxford y que con 24 años es el copresidente del gubernamental Partido Popular de Pakistán (PPP), pronunció el discurso en la meridional localidad paquistaní de Garhi Khuda Bakhsh, donde se encuentra el mausoleo de la familia Bhutto. "Somos quienes trajimos la democracia y somos los que también la salvaremos", manifestó un enérgico Bilawal Bhutto ante miles de asistentes, en un acto que le posiciona para liderar la candidatura del PPP en un futuro cercano.

Junto a él en el feudo familiar estaba su padre, el presidente Asif Ali Zardari, que tras cinco años en el poder ve menguar su apoyo por las mismas acusaciones que le condenaron a prisión a él y a su esposa: la corrupción. Bilawal se refirió a los líderes de la formación gubernamental y aseguró que en Pakistán existen aquellas personas que, como ellos, siguen el camino de la verdad y están dispuestas a dar sus vidas por la democracia, y aquellas otras que mienten y arrebatan a los demás sus derechos.

El primer ministro de Pakistán, Rajá Pervez Ashraf, anunció que Bilawal está listo para liderar al PPP en las próximas elecciones y afirmó, durante su discurso en el mausoleo de la familia Bhutto, que el partido "prosperará" con él. "Bilawal es el heredero de la filosofía política de los Bhutto", señaló Ashraf, quien remarcó que esa "travesía" continuará, pues Bilawal es tan "bravo" como su abuelo (el primer ministro Zulfikar Alí Bhutto, ejecutado en 1979 tras el golpe de estado del general Mohamed Zia Ul Haq) y su madre. No obstante, el ministro paquistaní de Relaciones Religiosas, Khursheed Ahmed Shah, informó el miércoles de que Bilawal no podrá presentarse como candidato hasta que cumpla 25 años, y si las elecciones generales se celebran en primavera de 2013, como está previsto, el hijo de Benazir Bhutto deberá esperar a la próxima convocatoria, ya que cumple esa edad en septiembre.

DInastía política La dinastía de los Bhutto ha monopolizado prácticamente el poder en Pakistán desde la independencia de India, en 1947, y ha sido desalojada del mismo por la fuerza en dos ocasiones. Zulfikar Ali Bhutto, padre de Benazir Bhutto y el primer líder elegido democráticamente, fue derrocado en un golpe militar en 1977 liderado por el General Muhammad Zia-ul-Haq y ahorcado el 4 de abril de 1979. Su hija fue primera ministra en dos ocasiones, en 1988 y 1993, pero ambos mandatos culminaron antes de tiempo bajo acusaciones de corrupción y mala gestión. Bhutto abandonó Pakistán ante la amenaza de una investigación judicial poco después de que el general Pervez Musharraf, también jefe del Ejército, tomara el poder en un golpe de Estado incruento en 1999. Hasta 2007, la ex primera ministra vivió en los Emiratos Árabes. Tras ocho años de exilio, Bhutto volvió a Pakistán gracias a un acuerdo con Musharraf. El mismo día de su regreso, la comitiva que acompañaba a la ex primera ministra sufrió una serie de atentados en Karachi, en los que murieron al menos 139 personas y más de 400 resultaron heridas. Dos meses después, ella misma fue asesinada por la insurgencia talibán. Durante la conmemoración del quinto aniversario del asesinato de su madre, Bilawal ha lanzado al fin su carrera política para devolver al apellido parte del prestigio perdido.