DAMASCO. La bomba había sido colocada en un camión cisterna detrás del hotel "Dama Rose", que a su vez se encuentra cerca de la sede del jefe del Estado Mayor en la capital, agregaron las fuentes.

Por su parte, el viceministro sirio de Asuntos Exteriores, Faisal Maqdad, calificó la explosión como un "acto terrorista" que buscaba "desestabilizar" el país.

Maqdad hizo esas declaraciones a la prensa mientras visitaba el lugar de los hechos y se ponía en contacto con miembros de la misión de observadores de la ONU para interesarse por su estado de salud.

El viceministro destacó que todos los observadores alojados en el hotel están en buen estado, según informó la televisión estatal siria.

Las ambulancias llegaron al lugar de la explosión en la exclusiva calle Abu Rumaneh, donde se ubican numerosas embajadas de países árabes y occidentales.

Según pudo constatar Efe, la zona ha vuelto a la normalidad después de que los bomberos hayan extinguido el fuego, que dañó algunos vehículos.

En los últimos meses, la capital siria ha sido escenario de explosiones de las que el régimen responsabiliza a grupos terroristas, como denomina a los rebeldes del Ejército Libre Sirio, con los que también se ha enfrentado en algunos barrios.

El pasado 18 de julio, los rebeldes sirios asestaron el mayor golpe desde marzo de 2011 contra el régimen sirio con el atentado contra la sede de la Seguridad Nacional en Damasco, que costó la vida al ministro y viceministro de Defensa, los generales Daud Abdelá Rayiha y Asef Shaukat, respectivamente, además de a un asistente presidencial.