La Haya. Ratko Mladic, imputado de once cargos por crímenes de guerra, crímenes contra la Humanidad y genocidio, en relación con la masacre de Srebrenica de julio de 1995, hizo gestos amenazantes a las madres de las víctimas de la matanza de que asistieron ayer a la primera sesión del juicio contra el exmilitar sebobosnio de 70 años en la sede del TPIY, en la Haya. Mladic compareció en la sala mostrando el pulgar hacia arriba e hizo un gesto de degüello a una mujer que perdió a su hijo, esposo y hermanos en la masacre. "Es el mayor carnicero de los Balcanes y del mundo entero", aseguraba Munira Subasic, que perdió a 22 miembros de su familia. Foto: efe