WASHINGTON. El montante de la propuesta, que será anunciada por Obama en un discurso al Congreso que será televisado, se verá compensado por recortes en el presupuesto para intentar convencer a los republicanos, que se muestran poco receptivos a la aprobación de nuevos gastos.
Los ayudante de Obama habían evitado dar cifras públicas sobre el montante económico del paquete salvo para indicar que tendrían un impacto "rápido y positivo en la creación de empleo".
Horas antes de que se hiciera público el coste del paquete de medidas, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, había afirmado que el Gobierno estadounidense "necesita hacer cosas que tengan un impacto directo a corto plazo para que crezca la economía y generar empleo, y el presidente hará propuestas que generen justo eso".
Por su parte, los republicanos han criticado a Obama por no contar con ellos en las discusiones sobre el paquete antes de que sea presentado y han señalado que cualquier proyecto sobre el aspecto laboral tendrá un difícil paso por el Congreso.
El republicano Mitch McConnel ha afirmado no tener dudas "de que el presidente propondrá muchas cosas el jueves que, si miramos de manera individual, sonarán bastante bien". "También estoy seguro de que, tomadas en su conjunto, serán más de lo mismo desde una perspectiva equivocada", ha dicho.