saná. El presidente del Yemen, Alí Abdalá Saleh, aceptó formalmente una iniciativa de los países del golfo Pérsico para que abandone el poder en el plazo de un mes, informó ayer a Efe el viceministro de Información Abdo el Guindi. "El presidente ha dado su aprobación definitiva a toda la iniciativa del golfo (Pérsico) sin condiciones y en el marco de la Constitución del país", señaló el Guindi.
Sin embargo, la oposición duda de las intenciones del presidente. Es por ello que todavía no se ve el final de la violenta lucha por el poder en Yemen, donde miles de personas volvieron a salir ayer a las calles de Saná para expresar su oposición al acuerdo y exigir la dimisión inmediata de Saleh, que lleva más tres décadas en el poder. Mohamed Kahtan, portavoz de la alianza opositora JMP, dijo: "El acuerdo está bien para nosotros, pero primero debería dimitir el presidente Saleh y luego podríamos formar un gobierno de unidad nacional con un nuevo presidente". Según la propuesta de mediación del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), se formaría un gobierno de unidad nacional y Saleh entregaría después el poder al vicepresidente en un plazo de 30 días.
Algunos opositores consideran que la oferta de dimisión de Saleh es tan sólo una táctica. Los jóvenes manifestantes, que con sus protestas desde fines de enero intentan derrocar al presidente, estiman que es insuficiente. Rechazan todo intento de mediación que no contemple la salida inmediata del presidente Saleh.