nueva york. El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, expresó ayer su preocupación sobre las acusaciones de fraude en las elecciones presidenciales celebradas en Haití y los episodios de violencia registrados en el país tras la divulgación de los resultados de la primera vuelta de los comicios.

Según explicó su portavoz, Martin Nesirky, a Ban le "preocupan las alegaciones de fraude" surgidas en el país tras conocerse que la candidata Mirlande Manigat ganó la primera vuelta y expresó su "fuerte compromiso en apoyo de unas elecciones libres y justas que reflejen la voluntad del pueblo haitiano".

"Los resultados no son definitivos y están sujetos a las disposiciones estipuladas en la ley electoral", indicó el portavoz del secretario general, quien aseguró que Ban insta "a todos los candidatos a agotar las soluciones formales y los procedimientos legales, lo que permitiría que surgiera una imagen más clara" de lo sucedido.

Esa sería "la base sólida desde la que avanzar", según Ban, quien expresó la "preocupación" que también le provocan los actos de violencia que se han registrado tras el anuncio de los resultados preliminares y recordó a todos los candidatos que tienen "la responsabilidad personal de pedir a sus seguidores que se mantengan en calma y detengan la violencia".

solución pacífica "Una solución pacífica a la situación actual es crucial no sólo para afrontar la epidemia de cólera a corto plazo, sino también para crear condiciones a medio plazo para la recuperación y el desarrollo (del país) tras el terremoto" de principios de año, indicó el secretario general de la ONU mediante su portavoz. Desde que se conocieron los resultados provisionales de las elecciones, las calles de Haití han registrado disturbios y protestas, especialmente en Puerto Príncipe, donde cientos de jóvenes han quemado neumáticos, lanzado piedras y asaltado comercios.