Está científicamente demostrado que las líneas blancas sobre el asfalto tienen una influencia muy potente en nuestra manera de actuar al volante. Aparte de que hayamos tenido que aprender en las clases de conducir cómo entender dichas pinturas mientras llevamos el vehículo, también es cierto que muchas veces se hace lioso seguir la corriente.
Por otro lado, la mala actuación de muchas personas en la carretera produce miles de accidentes en todo el mundo y está en nuestra mano la seguridad propia y la de quienes nos rodean.
Para que estos siniestros se vayan reduciendo en el colectivo de los motoristas, Austria ha empezado a implementar una medida que fusiona las marcas viales con las formas geométricas, en este caso, circulares.
Urbanismo táctico
Estas marcas viales, que también están implementándose en España, han sido un proyecto piloto de firma austriaca. La intención es reducir la mortalidad de los motoristas y parece que ha tenido resultados muy favorables.
Desde el Kuratorium für Verkehrssicherheit (KFV) mandaron a los encargados del mantenimiento de las carreteras pintar círculos blancos sobre el asfalto. Dichos círculos aumentan en tamaño a medida que la curva que va a tomar la moto se acerca y se ha comprobado que, al mismo tiempo, provoca que los motoristas inconscientemente reduzcan la velocidad.
Estos círculos se colocan junto a la línea divisoria de los carriles, por lo que se añade más seguridad al no permitir que se pegue la moto al carril contrario y que se produzca un accidente con mayor facilidad. Según los datos obtenidos de KFV tras unos meses de prueba, la baja de los siniestros se notó de inmediato. Antes de implementar esta medida, los accidentes tenían una probabilidad del 77% de ser graves o muy graves y esto se redujo hasta el 44% tras las pintadas.
Otra de las ventajas de estas líneas blancas es su bajo coste. Según las autoridades, el montante de la inversión había sido de 3.000€.
Geometría salvavidas
En lugares con gran circulación motor como las increíbles montañas del Tirol, han recalcado que los datos recogidos tras implementar los círculos han sido extraordinarios. Comparando las cifras de 2012 y 2018 con las recogidas en 2021 (teniendo en cuenta la reducción del tráfico debido a la pandemia), los accidentes de moto se han reducido un 80%.
Sin ser círculos, en Luxemburgo aplicaron unos criterios distintos. Decidieron pintar líneas rectas que, cada vez que el motorista se acercaba demasiado a la línea de separación, se alargaban.
En nuestro país, el Servei Català de Trànsit anunció un proyecto similar en 2020 para el Pantano de Foix. Ahora, se está intentando añadir a distintas ciudades para aumentar la seguridad general de la carretera.
Otras marcas viales
Pintar formas más llamativas en el suelo no es ninguna novedad. Hace años que la Dirección General de Tráfico (DGT) abrió las puertas a la creatividad y decidió pintar, por ejemplo, figuras de personas cruzando la carretera indicando la cercanía a una zona escolar.