Citroën busca dinamizar sus ventas con alicientes comerciales normalmente tan infalibles como ofrecer más producto por menos dinero. Esa es, en esencia, la finalidad de la serie especial Tonic, una tirada que enriquece cinco de los modelos más demandados del elenco de la marca francesa. Su salida al mercado permite adquirir unidades de C3, C4, C4 Picasso, Grand C4 Picasso y Berlingo Combi provistas de algunos de los complementos más solicitados por los clientes a un precio ventajoso.

Todos los ejemplares de la serie salen de fábrica pertrechados de ABS con repartidor electrónico de frenada y ayuda a la frenada de emergencia, aire acondicionado, faros antiniebla, radio CD mp3 con mandos en el volante y Connecting Box (Bluetooth, puerto USB y toma audio). También pueden disponer, bien de serie o bien como parte del menú opcional, de ESP con ASR; en los C4, C4 Picasso y Grand C4 Picasso se oferta control de tracción inteligente y ayuda a la salida en pendiente.

En el caso del C3 (desde 13.800 euros) se programan tres motorizaciones gasolina, 1.1i, 1.4i y VTi 95, además de la diésel HDi 70. El C4 compacto (a partir de 17.600 euros), que monta llantas de aleación de 16", recurre a unidades gasolina VTi 95 y diésel HDi 90 y 110. Sus variantes monovolumen (de 20.290 euros en adelante) emplean motores VTi 120 y HDi 110. El Berlingo Combi Tonic adopta los HDi 75 y 90 (14.190 y 15.005 euros), que deparan unas emisiones y un consumo moderados: brindan promedios de 5,3 litros y 139 g/km de dióxido de carbono.

Este modelo de concepción laboral estrena una estética más elaborada semejante a la de los acabados superiores del segmento, en especial el XTR con porte de todocamino. Engalana su interior con embellecedores cromados y acrecienta sus dotaciones con proyectores antiniebla, regulador-limitador voluntario de velocidad y los elementos del Pack Plus (elevalunas eléctricos secuenciales en el puesto del conductor, retrovisores eléctricos calefactables y cierre centralizado con mando a distancia). Deja como opción la pintura metalizada, ESP+ASR y la segunda puerta lateral acristalada.

El carácter exquisito de la línea DS alcanza su máxima expresión en la interpretación Ultraprestige del DS3. La versión que Citroën acaba de poner a la venta destaca por adoptar un grado de sofisticación aún más intenso, así como una combinación especial de tonos y materiales orientada a conferir al modelo un plus de refinamiento.

El DS3 Ultraprestige se encuentra disponible en cuatro colores de carrocería (Blanco Banquise, Hickory, Negro Obsidien y Gris Thorium). Incorpora una decoración exclusiva para el techo, con la forma de la trama DS, además de un alerón que procura una nota de deportividad. Luce, asimismo, ventanillas y luneta trasera sobretintadas. El conjunto se remata con la inclusión de llantas de aluminio de 17 pulgadas en tonalidad gris.

La ambientación interior del Ultraprestige aparece presidida por un revestimiento de los asientos en cuero Bracelet de confección artesanal. En las plazas delanteras, esta tapicería de alta calidad presenta un degradado de color, efecto visual que discurre desde el blanco de la parte superior del respaldo hasta el negro al nivel de la banqueta. La plancha del salpicadero contempla un elemento embellecedor también guarnecido en piel.

Citroën anima a este DS3 con dos motorizaciones: la gasolina THP de 155 CV y la e-HDi 110 CV Airdream. Hacerse con un Ultraprestige de gasolina supone invertir 25.040 euros, 510 menos que por la de gasóleo.