Paramédica de 29 años asesinada por el fuego de los siniestros mercenarios rusos de Wagner en el infierno de Bajmut cuando evacuaba heridos en la ambulancia donde prestaba servicio: Aunque cada vida importa, la pérdida de la suya adquiere un valor muy especial. No por nada era conocida como el ángel de Bajmat por sus compañeros de resistencia, los trabajadores de medios de comunicación y la población a la que atendía con un ánimo que iba mucho más allá del cumplimiento del deber. Una amiga suya recordaba emocionada la última conversación que mantuvo con usted, con esa sonrisa imposible en circunstancias infernales, pero muy consciente de que cada minuto podía ser el último. Que la tierra le sea leve. l