Me van a perdonar que les salga hoy con esta petenera, pero tengo callos en la retina a fuerza de leer una y otra vez el nombre de la ministra española de Igualdad. Así que les varío la dieta con un par de entrecomillados robados al columnista deportivo del momento, Mariano Rajoy Brey.
"Dije que Alemania es Alemania y creo que Alemania me ha dado la razón"
Ya hizo sus pinitos comentando etapas de la Vuelta (juraría que en Marca), y ahora se ejercita como erudito balompédico de los encuentros de España en Catar en el diario digital ultracatólico El Debate. Ya el nombre de la sección que firma lleva de serie una autoparodia: “Así fue (o no)”. Y en cuanto al contenido, taza y media. Rajoy en estado puro, con frases como la que les copio y pego: “Hace unos días, en mi comentario, dije que Alemania es Alemania y creo que Alemania me ha dado la razón”.
Ni corto ni perezoso, el de Pontevedra elevó la perogrullada (o quién sabe si la genialidad) a encabezado de la pieza: “Alemania me dio la razón”. Debajo, tres párrafos de profunda sabiduría con sentencias irrebatibles como estas: “Hay que pensar que si el balón está en el área del otro no te van a meter un gol. Como esté demasiado en la tuya, corres evidentemente algunos riesgos”. Ríanse, pero es, de largo, la pieza más leída de El Debate.
"El 14 de abril de 1931 vivimos un golpe de Estado de libro"
Les mantendré informados de las próximas lecciones del registrador de la propiedad, pero ahora volvemos al material de costumbre. Empiezo con un entremés de memoria histérica cosechado en el mismo chiringo digital donde se ejercita el expresidente español. Se lo debemos a Ramón Pérez-Maura, que después de haber glosado las bondades de Franco, hoy nos dice que los del 18 de julio del 36 fue una bromita al lado de lo del 14 de abril del 31: “Y si quieren hablar del «golpe de Estado de 18 de julio de 1936», hablemos primero del golpe de Estado del 14 de abril de 1931. Ya está bien de hablar del advenimiento de la II República Española como si hubiera sido la labor de los ángeles celestiales enviados por el Altísimo para salvarnos a todos. No. Eso es mentira. Por más que la corrección política cuasi dictatorial que vivimos nos impida decirlo, el 14 de abril de 1931 vivimos un golpe de Estado de libro”.
"Gracias a Pedro Sánchez y a su ambición de poder, los herederos políticos de ETA ya han conseguido expulsar a la Guardia Civil de su admirable y eficaz trabajo en el control del tráfico y de la seguridad vial de Navarra"
En La Razón, y con una semana de retraso, el incombustible Luis María Anson echa pestes sobre la (falsa) matraca de la expulsión de la Guardia Civil de Navarra. Lo hace con su estilo inimitable: “Por el plato de lentejas de cinco escaños, Pedro Sánchez ha pactado, con el brazo político de ETA, la eliminación de la Agrupación de Tráfico y Seguridad Vial de la Guardia Civil en Navarra, función que asumirá la Policía Foral. Pedro Sánchez se hincó de rodillas ante el rebenque de Bildu, partido al que directa o indirectamente ha cubierto de dinero y concesiones con el fin de contar con los votos que necesita para permanecer en el poder y aprobar las leyes. Gracias a Pedro Sánchez y a su ambición de poder, los herederos políticos de ETA ya han conseguido expulsar a la Guardia Civil de su admirable y eficaz trabajo en el control del tráfico y de la seguridad vial de Navarra”. Nota mental: buscar el significado de la palabra rebenque.
Con algo menos de gracia, Cayetano González se marca también unos cagüentales por lo mismo en Libertad Digital bajo el título “'In Memoriam' de los guardias civiles asesinados por ETA en Navarra”. Efectivamente, en el texto se citan los miembros del instituto armado asesinados por ETA, con este párrafo introductorio: “Dentro de la larga lista de mezquindades, despropósitos y barbaridades cometidas por Pedro Sánchez desde que está en la Moncloa, una no menor ha sido aceptar la pasada semana la petición de los herederos políticos de ETA de sacar a la Guardia Civil de Tráfico de la Comunidad Foral de Navarra, a cambio de asegurarse el apoyo de Bildu a los Presupuestos Generales del Estado del año que viene”. Lo escribe la misma persona que era el consejero aúlico del ministro de interior Jaime Mayor Oreja en el año 2000, cuando José María Aznar ofreció al entonces presidente de Navarra, Miguel Sanz, las competencias de Tráfico.
Doy carpetazo a esta atípica selección con la profecía de la pitonisa Isabel San Sebastián en ABC. Apoyándose en la última encuesta del vetusto diario, sostiene la vidente que a los malvados de Moncloa les queda un suspiro: “Pese a la demagogia barata desplegada en las descalificaciones vertidas contra los bancos, los «ricos», los «poderes ocultos» y demás chivos expiatorios abocados a cargar con las consecuencias de su pésima gestión. Pese al uso y abuso que hace de todos los resortes del poder, su tiempo en la Moncloa se agota. Como diría su socio y primer vicepresidente, el hoy derrotado Pablo Iglesias, tic, tac… Frankenstein”. Lo lleva diciendo desde que se formó el gobierno de coalición. Acabará acertando.