Kiko Hernández y Fran Antón se casaban en Melilla este pasado fin de semana acompañados por sus familiares y amigos, entre los que destacaron dos grandes ausencias. Por un lado, la de Belén Esteban, que se encuentra en Estados Unidos, y por otro, la de Jorge Javier, que en su caso prefirió no atender la invitación y ha expuesto los motivos que lo llevaron a hacerlo en su blog de la revista ‘Lecturas’.
Jorge Javier ha decidido escribir una dura y sincera carta en la nueva entrada de su blog en la citada publicación, en la que revela cómo es su relación con el que fuera colaborador de ‘Sálvame’ durante más de una década en la actualidad.
JORGE JAVIER, MÁS DURO QUE NUNCA CON KIKO HERNÁNDEZ
El conductor del nuevo programa de Telecinco, ‘Cuentos Chinos’, explica en la conocida revista del corazón que hace ya un tiempo que su relación con el televisivo se ha enfriado.
“Se ha casado Kiko y no he ido a su boda. De hecho, llevo sin hablar con él desde que contara en ‘Sálvame’ que está con Fran Antón y que es gay desde siempre”, explica Jorge Javier para comenzar su texto más sincero, “después de veinte años, no sé nada de tu vida”, lamenta Vázquez dejando ver lo decepcionado que está con el que fuera su compañero de programa.
Además, el presentador también explica que “estaba yo de baja médica la tarde que se subió al pulpillo para compartir con la audiencia su orientación sexual. No me emocioné ni nada”, detalla sobre el hecho de que Kiko Hernández eligiera la última semana de emisión de ‘Sálvame’ tras catorce años en antena para revelar tanto su relación como su enlace con Fran Antón.
“Luego creo recordar que con el paso de los días me envió un mensaje diciéndome que sabía que estaba enfadado con él, pero me quería mucho. Pues, chico, si sabes que estoy enfadado contigo y me quieres mucho, llámame. Que además sabes que estoy en casa de baja”, recrimina en su carta Jorge Javier al colaborador televisivo, antes de confesar que lo embargó la decepción hacia Kiko, y “quizás la tristeza también. Y el desencanto”.
“Es muy duro aceptar que esa persona con la que has pasado y compartido tantas y tantas cosas no es más que un perfecto desconocido”, sentencia el comunicador con dureza.