Hace ya dos años que María Teresa Campos se alejó de la televisión y desde entonces cada vez se deja ver menos, con problemas de salud e ingresos en el hospital que sus hijas no esconden. Tanto Terelu Campos como Carmen Borrego han asegurado en numerosas ocasiones que están muy preocupadas por su madre, que casi no quiere salir de casa cuando está a un mes de cumplir 82 años. El ictus que sufrió en 2017, una caída sufrida en casa y demás dolencias, además del deterioro propio de la edad, han hecho mella en la veterana periodista, a la que se vio con aspecto bastante desmejorado en sus últimas apariciones.

A finales de marzo Terelu Campos preocupó con las palabras que escribió sobre su madre en su columna de la revista Lecturas. "Se acerca la Semana Santa y sé que la voy a vivir con mucha tristeza, porque ya nada es igual ni volverá a serlo nunca, Se me caen las lágrimas mientras escribo esto y me cuesta recuperar el aliento al saber que la persona más importante de mi vida no volverá a estar nunca más en su Semana Santa malagueña”.

Unas frases muy duras a las que se añade otra en su última columna en la citada revista, dedicada a elogiar la figura de su madre como feminista, progresista y su labor de informar y culturizar a la mujer en televisión. Un texto que acaba con unas palabras que vuelven a incidir en el delicado estado de salud de María Teresa Campos, que “ya no puede decidir por ella misma. “Mi madre es mi mayor patrimonio. Se me llena la boca cuando lo digo: mi madre. Por desgracia, en estos momentos, ella ya no es lo que era. Por eso, me paso la vida pidiéndole a los medios que respeten a una persona que ya no puede decidir por ella misma”.