Hoy 9 de marzo es un día que todos deberíamos tener marcado en rojo en el calendario.
Se celebra el Día Internacional de la Tortilla de Patata. Un plato muy sencillo pero que es el pintxo favorito de miles de personas, sobre todo en Vitoria.
La tortilla tradicional lleva patatas, huevos y sal. Un ingrediente más polémico es la cebolla, en esa cuestión cada uno decide.
Hay tres bares donde cocinan algunas de las tortillas de patata que arrasan entre los clientes, dos de barrio y uno de pueblo. De sus cocinas salen a diario uno de los manjares más apreciados acompañados por un café o una caña.
Restaurante Bruselas (Salburua)
En la calle Avenida de Bruselas hay un bar donde cada día cocinan varios tipos de tortilla de patata que triunfan por su sabor y por el tamaño de los pintxos.
La de jamón york y queso comparte sitio en la barra con otras que también tienen muchos adeptos, como la de setas.
Un bar en el barrio de Salburua que se ha convertido en una parada obligatoria para muchos padres y madres del colegio de Salburua que está justo enfrente.
Y para mucha gente que tras dar una vuelta por el parque del anillo verde hasta el Ataria o el Buesa Arena, acaba la caminata con un buen pintxo de tortilla y un café en el Bruselas.
Cafetería Emar (Judimendi)
Esta cafetería de Judimendi es todo un clásico en el barrio y en el resto de la capital alavesa. De su cocina salen a diario algunas de las mejores tortillas de patata de la ciudad.
Tal es su éxito que han ganado concursos y hay gente de otras zonas de la capital alavesa que va expresamente los fines de semana hasta este local del Polvorín Viejo a probarlas porque lo han leído en redes sociales o se lo han recomendado.
Los pintxos se consumen recién hechos y calientes, algo muy valorado por los cientos de clientes fieles, debido al frenético ritmo que llevan en la cocina.
Restaurante Zurbano (Zurbano)
Ubicado en la entrada de la localidad de Zurbano, apenas a un par de kilómetros desde el pabellón Buesa Arena, este restaurante ofrece una importante variedad de tortillas de patata para almorzar un buen pintxo.
A la receta más tradicional se unen en la barra de este bar otras apuestas más arriesgadas como las tortillas rellenas o la tortilla con butifarra negra, irresistible.
En una ubicación inmejorable por su tranquilidad, la gente llega o bien en coche o a pie dando un paseo desde el pabellón Buesa Arena.
Es el lugar perfecto como punto de descanso y "repostaje" para cientos de ciclistas tras completar una ruta el sábado o el domingo por la mañana y antes de volver a casa.
