Los autores de los 84 proyectos del programa Hobetuz que someten sus ideas a votación desde mañana se afanan en difundir sus propuestas y para ello tiran de todas las herramientas a su alcance: personas voluntarias, carteles, vídeos, redes sociales, etc.
Cuatro de los autores desgranan a DNA sus iniciativas para mejorar Gasteiz.
En recuerdo de las mascotas
'El último parque'
Un espacio para el recuerdo de las mascotas muertas es lo que propone habilitar en Vitoria la asociación para un trato ético con los animales Atea.
Enfatiza Mariasun Heras que no se trata de un cementerio sino de un jardín o parque en el que poder plantar un arbusto, colocar una placa e, incluso, depositar las cenizas de las mascotas.
Un espacio abierto por el día y cerrado por la noche –tipo al rincón de la secuoya de Urkide– en el que también poder pasar el duelo.
¿En qué beneficia esta iniciativa a Vitoria? En primer lugar, responde a una demanda de la ciudadanía, responde Heras.
Y en segundo lugar, “hará de Vitoria una ciudad más respetuosa con los animales de compañía que, a día de hoy, son tratados como residuos, como basura cuando fallecen, razón por la que los dueños se decantan por la incineración y, en muchos casos, guardan las cenizas en sus casas”, señala.
En definitiva, “un espacio bonito, a la par que educativo, para recordar a esos seres queridos que también viven con nosotros”, apela.
Lakuabizkarra
Cupulakua
El educador de calle Unai Arambarri ha trabajado con el alumnado de 3º de la ESO del instituto de Lakua la iniciativa Cupulakua.
Consiste en cubrir la zona de merendero del parque público situado entre Landaverde y Pamplona, en Lakuabizkarra, donde los estudiantes quedan al salir de clase.
La idea es cubrir el espacio de las seis mesas de pic-nic con una cúpula similar a las que ya protegen dos áreas infantiles de juego del parque del Este de Salburua y cerca de las pistas de skate de Zabalgana.
El objetivo, protegerse de la climatología adversa, tanto los días de lluvia como los de calor extremo.
“Beneficiaría a Lakua, en particular, y a la ciudad, en general, porque no solo es un punto de encuentro habitual de la chavalería, también de niños y personas mayores”, subraya Arambarri.
El planteamiento surge tras concluir los escolares que son muchos los días de mal tiempo que no pueden utilizar este txoko del parque que tanto les gusta. “Es una forma de dar más uso a un espacio que ya existe”, añade.
Sala de exhibición
Txoko de gigantes y cabezudos
Se trata de abrir en Vitoria un espacio expositivo para dar a conocer todos los personajes festivos de Vitoria que forman parte del patrimonio cultural de la ciudad y abrirlo al público dos tardes a la semana, sintetiza Joseba Perea, miembro de la comparsa.
“Que la ciudadanía los pueda visitar durante todo el año y los escolares acudir en visitas guiadas, no como ahora que están almacenados en Musiketxea, en San Antonio”, dice.
Propone como ubicaciones posibles la gasolinera Goya, los palacios Escoriaza-Esquível y Maturana-Verástegui o una sala bajo el Iradier, aunque se decanta por la primera opción.
Además de los 10 gigantes, 10 cabezudos, 4 sotas y 4 caballos de la baraja, varias cabezas antiguas de gigantes y cabezudos y el toro de fuego, allí estarían igualmente Celedón; Edurne y Celedón Txiki; Olentzero y Mari Domingi y la sardina de Carnaval.
Es decir, todos los elementos festivos del año reunidos. “Presentamos la idea hace dos años y nos quedamos a las puertas de conseguirlo”, recuerda.
Conservar el río Errekaleor
Larrein ur parkea
Conservar y poner en valor la riqueza del río Errekaleor, único cauce visible, junto al Santo Tomás, y al Zadorra que bordea Gasteiz.
Es el propósito que se marca Josu Aranbarri al plantear la creación de un parque infantil, con el agua como temática principal en mitad de un área de expansión urbanística, ya difícil de frenar, como Larrein.
“No hay nada mejor que acercar a los niños al río y dejar que interactúen con el medio natural para darle valor”, considera.
Resalta el interés comunitario de esta actuación planteada en una parcela de equipamiento, ahora vacía, situada entre dos áreas infantiles con columpios en la zona de Guillermo Elio Molinuevo.
“Larrein apenas tiene equipamientos infantiles, solo edificios, pese a que lo que más hay son niños y niñas”, indica.
Así que, al igual que Lakua dispone del Galeón, en este caso, habría que buscar otra referencia con el agua como reclamo.
“Si apostamos por naturalizar los patios de los colegios, por qué no extrapolar esta idea al resto de espacios del la ciudad para ser coherentes”, clama.
