Sigue en directo la séptima etapa de hoy.
El relato de la sexta etapa.
La etapa de hoy era una de las esperadas en este reto.
Siempre he tenido ganas de hacer la ruta que sigue el camino de Santiago por la costa. Y durante la etapa de hoy y parte de la de mañana voy a tener la oportunidad de realizarlo.
Encima he tenido la suerte que el tiempo me ha regalado sol, un cielo azul despejado y no excesivo calor.
El día amanecía fresquito pero la subida desde la playa de Ondarreta hasta Igeldo nos iba a quitar el frío rápido a mi acompañante y a mi.
Durante toda la jornada he contado con la compañía de Guipu que además de colaborar con Aefat, con Adela, de marcar innumerables recorridos de carreras, hoy ha sacado todo el día para estar conmigo. No se ya como dar las gracias a toda la gente que me está ayudando en esta aventura y reto por intentar dar visibilidad y recaudar fondos para la lucha contra la Ataxia telangiectasia.
Tras llegar a Igeldo continua una parte muy bonita entre un montón de caseríos por pistas y senderos que cada poco nos regalaban el azul del mar.
En Orio, tras una larga bajada donde algunos peregrinos ya iban sufriendo por lo empinada de la misma, hemos parado para comer y beber algo.
A partir de aquí un continuo sube y baja nos ha llevado a Talaibidea, un sendero al lado del camping de Zarautz que pegado a los acantilados serpentea para bajar al arenal de esta población guipuzcoana.
Nos hemos permitido el lujo de no seguir el recorrido, y a pesar de hacer algún metro más, ha merecido la pena atravesar la impresionante playa por la arena.
De aquí por el camino de la costa a Getaria, donde tras otra parada para beber y comer algo, subimos por camino empedrado hasta la parte alta.
Las vistas de los viñedos de Txakoli ya floreciendo con el mar y la montaña juntos son, han sido y serán de lo mejor que he visto en todas la jornadas.
Ya solo queda bajar a Zumaia y acabar otra vez fuera del campo de fútbol pero eso sí con una sonrisa para todos mis chic@s y con el acompañamiento de mi amiga Sara y su familia lo que han aportado mucho a este final.
Mañana la etapa que más miedo tengo por el desnivel y el estado cada vez más cansado de mis pies. Eso sí cuento con la fuerza que me dan mis héroes, la familia de Aefat.
