Hablar de 2023 será recordar el año de los récords de Max Verstappen y de Red Bull, la pareja más dominante de la historia de la Fórmula 1. El tricampeón mundial cerró la temporada como la empezó, con victoria en el Gran Premio de Abu Dhabi y, como casi todo el curso, con apenas competencia. Si acaso unos primeros metros de disputa con Charles Leclerc, a la postre segundo, para decidirse una nueva conquista, la 54 de su trayectoria deportiva, con la que desempató con Sebastian Vettel como tercer piloto con más victorias; por delante solo aparecen Michael Schumacher (91) y Lewis Hamilton (103).

Como este nuevo entorchado, Verstappen baja la persiana con 19 victorias tras 22 carreras, lo que significa un 82,7% de triunfos en un curso, un nuevo récord que supera el 75% de Alberto Ascari en 1952. Mad Max solo ha cedido con dos segundos puestos y una quinta posición. Si en 2022 elevó la mayor cantidad de victorias en una misma temporada a 15, para dejar obsoletas las 13 de Schumacher (2004) y Vettel (2013), en esta ocasión la cifra ha ascendido a 19, que a su vez es el mayor número de podios en una misma campaña.

Este año Verstappen también estableció una nueva plusmarca en la F-1 al conseguir diez triunfos consecutivos para batir los nueve de Vettel en 2013. Gracias a estos resultados ha logrado registrar la mayor suma de puntos en un año, 575, y la mayor diferencia con el segundo clasificado, 290. Es, además, el primero en completar 1.000 vueltas en cabeza en una misma temporada.

Pero tras finalizar 2023 Verstappen puede seguir estirando otros récords, como el de 41 carreras consecutivas puntuando. “Siempre lo quieres hacer mejor. No solo con victorias y campeonatos, pero será difícil repetirlo”, confesó el neerlandés de 26 años, la voracidad hecha piloto.

A nivel de equipo, Red Bull ha rubricado por primera vez el título y el subcampeonato, con Verstappen y Sergio Pérez, además del Mundial de Constructores. La escudería energética se ha adjudicado el 95,45% de los grandes premios este año, otro nuevo récord. Y a juzgar por la actitud de Verstappen, la jerarquía puede continuar. En el circuito de Yas Marina advirtió que ya están buscando tener “un coche competitivo para el año que viene” y dijo estar “listo para la batalla”, para un nuevo capítulo de la F-1 que arrancará la primera semana de marzo.

Alonso logra la cuarta plaza del campeonato

En Abu Dhabi también se decidieron las posiciones entre el cuarto y el séptimo clasificado, que quedaron así: Fernando Alonso, cuarto (206 puntos) tras ser séptimo en la última cita; Leclerc, quinto (206) tras ser segundo; Lando Norris, sexto (205) tras ser quinto y Carlos Sainz, séptimo (200) tras sufrir un abandono. Esta prueba postrera también decantó al subcampeón de constructores para Mercedes, tras sumar 409 puntos por los 406 de Ferrari. Mientras, McLaren cerró el curso en la cuarta plaza (302) y Aston Martin, en la quinta (280).

“A nivel personal fue un año de 10, en la línea de 2012, con ocho podios y casi 300 puntos para el equipo”, celebró Alonso, que sostuvo un bonito duelo con Lewis Hamilton. El asturiano concluyó el curso “orgulloso”. “El año que viene volveremos más fuertes. El Mundial 2024 será más fácil para nosotros”, se atrevió a decir esperanzado.

Sainz, por su parte, terminó la temporada desolado, con un abandono tras arrancar decimosexto. “No ha sido un final de temporada bueno para mí. Ya desde Las Vegas, estas dos carreras no han salido como yo esperaba, como me hubiera gustado”, confesó el madrileño, que señaló al neumático duro como el talón de Aquiles del Ferrari: “Hemos sufrido mucho con ese neumático todo el año. Siempre que hemos empezado con el duro nos ha ido mal y esta vez ha vuelto a pasar. Es algo que con nuestro coche no sé por qué nos pasa, no podemos hacer lo que sí puede el resto, y es algo que hay que analizar de cara al futuro. Cuando me vaya a dormir y me levante mañana con un poco de mejor humor, veré las cosas positivas, que seguro que las hay”.