Mañana están convocados los trabajadores de la factoría gasteiztarra de Mercedes-Benz a una jornada de huelga por partida doble, dentro de los dos calendarios de movilizaciones que manejan UGT y CCOO, por un lado, y ELA, LAB y ESK, por otro. Será el pistoletazo de salida a dos semanas de paros: UGT y CCOO llaman a parar además el miércoles 29, mientras que ELA, LAB y ESK han convocado huelga entre el 27 de junio y el 1 de julio. A esta cuestión se refirió ayer el director general de SEA Empresas Alavesas, Juan Ugarte, para advertir de que los paros en la planta no son “la mejor tarjeta de presentación” para atraer una inversión “importantísima”. “Llamo a las partes a la cordura porque nos la jugamos los trabajadores actuales, los futuros, todo Álava y una parte importante de Euskadi”, afirmó.

En Radio Euskadi, Ugarte aludió así a la posible inversión de 1.200 millones anunciada por la dirección de Mercedes en la planta de Vitoria y los paros sindicales con motivo de la negociación del convenio. Tras reconocer que el anuncio de huelgas le preocupa “mucho”, subrayó que Mercedes emplea a alrededor 5.500 personas de manera directa y a otras 10.000 de manera indirecta. “Hablamos del proyecto empresarial por volumen de empleo de más importancia en Euskadi. Encima de la mesa hay planteada una inversión importantísima del grupo a la que puede ser candidata la planta de Vitoria y tenemos una gran oportunidad”, incidió, al tiempo que hizo un llamamiento a las partes “a la cordura porque nos la jugamos los trabajadores actuales, los futuros, todo Álava y una parte importante de Euskadi”.

A su juicio, un conflicto “no es la mejor tarjeta de presentación” que puede poner encima de la mesa una factoría para conseguir que se le adjudique un proyecto de esta envergadura. “Hago un llamamiento a la cordura. Creo que las condiciones de los trabajadores de Mercedes son envidiables para el resto de trabajadores de Euskadi y hay que intentar llegar a un acuerdo que genere unas bases para poder llevarse con éxito esta inversión tan importante”, sostuvo.

Asimismo, manifestó que, en un sector “tan complicado” como el del automóvil en el que “fluctúa tanto la demanda, un elemento clave para mantener las fábricas y su rentabilidad es la flexibilidad”. “Es el único elemento que está poniendo encima de la mesa la empresa; mejorar un poco esa flexibilidad, pero no por capricho sino para adaptarse a las circunstancias de un mercado cambiante. Es importante tener esas opciones”, argumentó. Respecto a la visita del lehendakari a Alemania –prevista para el 6 de julio– para reunirse con el CEO de Mercedes-Benz Vans, Ugarte insistió en que la inversión para la planta de Vitoria sería “brutal” y “consolidaría el proyecto Mercedes para los próximos diez años”. “No somos conscientes de lo que supone para Álava y Euskadi y me parece normal que las instituciones echen el resto para que el proyecto se ejecute en Álava”, concluyó.