- Tubos Reunidos ha cerrado el primer semestre del año con unas pérdidas de 45,3 millones, si bien constata un incremento de la actividad y su cartera de pedidos ha aumentado un 56% respecto al semestre anterior, según ha comunicado a la CNMV. En su comunicación, la compañía destaca que ha logrado mejorar sus cifras comerciales y de actividad de negocio, en relación con el semestre anterior, apreciando “signos de recuperación económica mundial”.

En este contexto, apunta que la cartera de pedidos de la que partieron a cierre de junio de 2021 es de 109 millones de euros, un 11% superior a la del mismo periodo del año anterior y un 56% superior a la que tenían al cierre del ejercicio 2020. La compañía explica que no puede decirse que “los efectos de la pandemia se han superado”, pero sí que hay síntomas de recuperación que apuntan a 2022 como el año “en el que los grandes proyectos de inversión retomen su actividad”.

Con este escenario, ha cerrado el primer semestre con unas pérdidas de 45,3 millones, una cifra similar a las del mismo periodo del año anterior (45,7 millones), pero se reducen respecto a las del segundo semestre de 2020 (52,2).

El importe neto de la cifra de negocio se ha elevado a 115,7 millones, un 14% menos que en el mismo periodo del año pasado, pero aumenta un 8% respecto al segundo semestre de 2020.

Por otra parte, destaca que el primer semestre de 2021 cierra una época de “incertidumbre financiera” para el Grupo Tubos Reunidos, tras la firma, en julio, de un acuerdo de apoyo financiero público temporal, que supone la concesión de un préstamo participativo, por importe de 112,8 millones de euros y una novación de las condiciones previas con las entidades financieras, en cuanto a plazo y costes de la deuda financiera. De cara al segundo semestre, espera que la demanda siga manteniendo “un buen ritmo de manera más sostenida”, aunque no confía en que se reactiven antes de 2022 los principales proyectos de Powergen y Downstream.

Tubos Reunidos entiende que la recuperación de la actividad es “irregular” y se está observando un incremento de los costes de fabricación. Según especifica, los costes de las materias primas y las energías están suponiendo un “riesgo importante” en esta fase de reinicio de la actividad industrial, pese a los esfuerzos por trasladar este impacto a los precios de venta, por lo que “el próximo reto a corto plazo seguirá siendo obtener la rentabilidad de los productos”.

Las ventas de tubos han ascendido a 107,3 millones de euros. Por áreas, y en relación con el segundo semestre de 2020, crece en Lejano Oriente (70%), mientras que reduce las ventas en otras áreas como en Oriente Medio y África (-63%) o Norte América (-4%). La recuperación progresiva de la actividad en ciertos segmentos y áreas ha permitido a Tubos Reunidos incrementar la facturación en el periodo un 6% respecto al segundo semestre de 2020, de manera conjunta.

En su opinión, la actividad no volverá a una situación “normal” prepandemia en países clave para la compañía como India y Arabia Saudí en el corto plazo. No obstante, en Suramérica Tubos Reunidos ya está materializando operaciones para “proyectos importantes de refino”.