La planta de Mercedes Benz en Vitoria seguirá parada la próxima semana por la crisis de los semiconductores.

Como ha adelantado este jueves DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, la dirección de la firma ha tomado la decisión de suspender también la producción la semana que viene, al igual que ha sucedido estos días, ante la falta de microchips procedentes de Asia.

Esta nueva parada es la sexta desde el mes de mayo, y supone la primera vez que Mercedes para dos semanas seguidas. En total, la empresa ha suspendido la producción 20 días desde el 25 de mayo por culpa de los chips. Además, este jueves se agota la bolsa de flexibilidad de la plantilla, por lo que mañana viernes entra en vigor el ERTE acordado en la planta.

La nueva suspensión de la producción trae además consigo un reajuste en el número de vehículos previstos para este año, al recortar la cifra total en 3.600 nuevas unidades y dejar la previsión anual en 134.561 vehículos. Teniendo en cuenta que el parón de la semana pasada supuso un recorte de 2.840 unidades, estas dos semanas consecutivas de parada implican en casi 6.500 vehículos menos en la previsión de vehículos para este año en la planta gasteiztarra.

En definitiva, el segundo parón consecutivo al que se ha visto abocada Mercedes supone un nuevo varapalo para la empresa, que se ha visto enormemente afectada por la crisis de los semiconductores, un problema que está causando auténticos quebraderos de cabeza no sólo al sector automovilístico, sino también a los mercados tecnológicos.

Esta ausencia de semiconductores, necesarios para la fabricación de los vehículos -en el caso de la factoría gasteiztarra, para el ensamblaje de sus modelos Clase V y Vito-, mantiene en una incertidumbre constante a la industria y no tiene sin visos de solución a corto plazo.