La Comisión Europea (CE) advirtió ayer a España de que ligar la actualización de las pensiones a la inflación podría aumentar el gasto público y la desigualdad entre generaciones, al tiempo que le pidió no revertir la reforma laboral de 2012 sin evaluar antes sus consecuencias. Las advertencias se recogen en el informe anual del Ejecutivo comunitario sobre la economía española. La CE señala que España, pese a acumular seis años de crecimiento del PIB y del empleo, sigue registrando “vulnerabilidades estructurales” ligadas al alto nivel de la deuda pública y privada, la todavía elevada tasa de paro y la baja productividad.