MADRID - El Consejo de Ministros aprobó ayer el rescate de ocho de las nueve autopistas de peaje que están en quiebra al autorizar la anulación de los contratos con las actuales sociedades concesionarias de las vías.

El Gobierno español, que estima una factura de 2.000 millones de euros frente a los 4.500 que piden los fondos que controlan la deuda, también instó a que Fomento, a través de su sociedad Seittsa, pase a hacerse cargo de las autopistas, según el ministro portavoz, Íñigo Méndez de Vigo.

En concreto, el Consejo autorizó rescindir siete contratos de concesión. Se trata de los correspondientes a las autopistas radiales R-3 Madrid-Arganda y R-5 Madrid-Navalcarnero, y los de la R-4 Madrid-Ocaña, la R-2 Madrid-Guadalajara, la M-12 Madrid-Aeropuerto de Barajas, la AP-36 Ocaña-la Roda, el tramo de la AP-7 entre Cartagena y Vera, y la Circunvalación de Alicante. - Europa Press